Las feministas del PSOE aplauden la reforma de Ayuso de la ley trans y piden cambiar la estatal
FeMes considera que la nueva norma de la Comunidad de Madrid protege mejor a los menores, que deberán tener supervisión médica si quieren someterse a un proceso de transición de género.
31 diciembre, 2023 19:48La asociación Feministas Socialistas (FeMeS), afín al PSOE, aplaude los cambios que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha introducido en la ley de Identidad y Expresión de Género de la Comunidad de Madrid, para proteger a los menores, y pide a la nueva ministra de Igualdad, Ana Redondo, que reforme en el mismo sentido la ley trans de Irene Montero.
Esta actitud contrasta con la que han mantenido el PSOE y el Gobierno de Pedro Sánchez. La ministra Ana Redondo encabezó el pasado día 17 una manifestación por las calles de Madrid, junto al secretario de políticas LGTBI del PSOE, Víctor Gutiérrez, para denunciar que Ayuso "vulnera los derechos" de este colectivo.
La reforma de la ley autonómica de Identidad y Expresión de Género e Igualdad Social y no Discriminación (conocida como ley trans), que la Asamblea de Madrid aprobó el pasado día 22 con los votos del PP y Vox, establece que los menores que quieran someterse a un tratamiento hormonal deberán contar con la supervisión de profesionales pediátricos y de salud mental infanto-juvenil.
La reforma también introduce algunos cambios conceptuales: las menciones a la "identidad" y la "expresión de género" han sido sustituidas por sintagmas como "condición sexual" y "sexualidad".
En declaraciones a EL ESPAÑOL, la vicepresidenta de FeMeS, Altamira Gonzalo, ha mostrado su satisfacción por los cambios de la ley autonómica encaminados a proteger a los menores y se ha mostrado partidaria de que el Ministerio de Igualdad acometa una reforma similar de la ley estatal, que a su juicio no respeta el "interés superior del menor".
La vicepresidenta de FeMes considera que la ley trans de Irene Montero ha supuesto un retroceso en los derechos y libertades de las mujeres, que ahora "ven perturbada su tranquilidad" cuando tienen que compartir baños, probadores o vestuarios con hombres que han tramitado el cambio de género ante el Registro Civil.
La ley abre la puerta a que esta situación se produzcan también en las prisiones femeninas. Altamira Gonzalo advierte de que el perjuicio se ha trasladado también al ámbito del deporte, donde mujeres con una larga trayectoria llena de sacrificios tienen que competir ahora con hombres que han tramitado el cambio de sexo, sólo sobre el papel.
[Quién es quién en el cisma del PSOE provocado por la autodeterminación de género de la Ley Trans]
El colectivo Feministas Socialistas (FeMeS) también denuncia que la ministra Irene Montero tramitó su ley trans por la vía de urgencia, para evitar que fueran escuchados en las Cortes los expertos en esta materia.
Altamira Gonzalo admite que será "difícil" que la nueva ministra de Igualdad impulse una reforma de la ley trans, porque tiene una "gran tarea por delante para seguir avanzando en los derechos de las mujeres, tanto en la violencia de género como en las brechas salariales y los techos de cristal", que a menudo impiden su progreso profesional en las empresas e instituciones.
La vicepresidenta de FeMeS alude a la experiencia de países como el Reino Unido, Suecia y Finlandia, que impulsaron leyes trans similares a la de Irene Montero, y han tenido que dar marcha atrás ante los perjuicios que la norma había provocado para las mujeres y los menores.
La campaña desatada por Sumar y Podemos contra la nueva directora del Instituto de las Mujeres, Isabel García, ha puesto en evidencia la ruptura entre el feminismo clásico y la ideología queer (que niega la existencia del sexo biológico y presenta el género como una decisión personal, que se puede modificar a lo largo de la vida como un acto de voluntad).
Una división que ya se ha mostrado en las calles, en las últimas manifestaciones feministas del 8-M, con dos marchas separadas: la encabezada por el PSOE y la que protagonizan el resto de grupos de izquierdas.
"Nosotras", señala Altamira Gonzalo en alusión a FeMeS, "somos las feministas y radicales que defienden la lucha por los derechos de las mujeres. Lo otro no se puede definir como feminismo".
"La ciencia es tozuda", añade, "quien nace mujer muere mujer, y quien nace hombre muere hombre. Aunque uno se opere, los cromosomas están ahí".
La vicepresidenta de FeMes lamenta que los cuatro años de Irene Montero al frente del Ministerio de Igualdad han sido años perdidos, en los que "no se han producido avances importantes en los derechos de las mujeres". A su juicio, el Ministerio dio la espalda al movimiento feminista para centrarse en cuestiones como la ley trans.
[Los países en los que se inspiró la Ley Trans para el cambio de género en menores dan marcha atrás]
Al respecto, Altamira Gonzalo recuerda que la ley del sólo sí es sí ha tenido "consecuencias negativas para las mujeres": ha provocado rebajas de pena para más de 1.200 agresores sexuales, de los cuales 121 han salido de la cárcel, según las cifras oficiales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Tanto Irene Montero como Podemos se negaron a reformar la ley (el PSOE tuvo que cambiarla con el apoyo del PP) y optaron por culpar de estas sentencias al "machismo" y la falta de formación jurídica de los jueces.
Altamira Gonzalo es especialista en Derecho de Familia y en Derecho Comunitario por la Escuela de Práctica Jurídica de la Universidad Complutense de Madrid. Ha presidido el Consejo Asesor de Igualdad para las políticas de igualdad del PSOE (entre 2017 y 2021) y ha sido vicepresidenta de la Asociación de Mujeres Juristas Themis. También fue asesora jurídica de la directora del Instituto de la Mujer entre 1987 y 1990.