Fraude a la Ley Trans: sólo en Ceuta, 37 funcionarios cambian de sexo pero no de nombre ni de pareja
La mayoría son policías y militares, de entre 40 y 50 años de edad, que siguen conviviendo con sus familias tras el cambio. Las distintas fuentes consultadas indican que lo hacen para obtener beneficios por ser mujer.
4 marzo, 2024 02:00En Ceuta se está produciendo un fenómeno llamativo en torno a la Ley Trans. Desde que la norma entró en vigor hace exactamente un año, hay 37 hombres que han cambiado su sexo al femenino y que, sin embargo, han mantenido su nombre masculino y su estado civil, continuando así con su pareja e hijos.
Así lo trasladan fuentes jurídicas a EL ESPAÑOL. Señalan que la mayoría de estas personas son funcionarios, miembros del Ejército, la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Local de la ciudad autónoma. Además, tienen una edad media de entre 40 y 50 años.
Estos datos apuntan a que se estaría cometiendo un fraude masivo a la Ley Trans en Ceuta. Estas personas no estarían cambiando su sexo por ser personas transexuales, sino para obtener distintos beneficios al pasar a ser oficialmente mujeres.
Desde que la norma entró en vigor el 2 de marzo del año pasado, basta cumplir un sencillo trámite en el Registro Civil para formalizar el cambio de sexo. Ya no hacen falta informes médicos ni tratamientos hormonales, algo que antes sí se requería. Por ello, las autoridades ven difícil combatir el presunto fraude.
Las fuentes explican que desde el año pasado ha habido un total de 49 cambios de sexo en Ceuta. Ocho de ellos han sido de mujeres que han transicionado a hombres, con el consiguiente cambio de nombre. Han pasado de tener nombres femeninos a tener nombres masculinos.
El resto, 41 personas, han pasado de ser hombres a ser mujeres. Sin embargo, sólo cuatro de este grupo han cambiado también de nombre. El resto, 37, ha mantenido su nombre masculino. Estas personas representan el 75,5% del total de la población que ha recurrido a la Ley Trans, una cifra especialmente elevada.
Los beneficios por ser mujer
Fuentes de las Fuerzas Armadas y de los cuerpos policiales presentes en Ceuta confirman esta tendencia y explican que los cambios de sexo se realizan para tener diferentes beneficios, según cada caso.
Por ejemplo, ser oficialmente una mujer podría ayudar a estas personas a promocionar internamente y beneficiarse de las medidas de acción positiva pensadas para incrementar la presencia femenina en algunos puestos y en el cuerpo de mandos.
En el caso del Ejército, la Ley de Tropa y Marinería estableció la salida de las Fuerzas Armadas de los soldados temporales al cumplir los 45 años. Como conseguir una plaza fija es muy difícil, hay muchos militares que optan luego por hacer oposiciones para entrar en la Guardia Civil o la Policía Nacional. De hecho, la Guardia Civil reserva plazas para los opositores que vienen del Ejército.
[Las feministas del PSOE aplauden la reforma de Ayuso de la ley trans y piden cambiar la estatal]
En este caso, los opositores se presentarán a unas pruebas físicas específicas para mujeres, que son menos exigentes que las pruebas de los hombres. También podrían servir para conseguir un puesto con mayor facilidad que si apareciesen en el registro como varón.
"Aunque ahora ya no hay plazas específicas para mujeres, hay plazas en las que sí buscan un mínimo de presencia femenina en otras clases de funcionariado", explica uno de los militares ceutíes que ha cambiado de sexo al femenino.
Pero también hay gente haciéndolo por motivos ideológicos, "como una especie de rebeldía contra la ley", explica un agente de la Guardia Civil. "Ya he visto varios casos entre mis compañeros, y va a ir a más, porque hay bastantes personas que lo han solicitado y están en el proceso. Así que, de un tiempo a esta parte, la cifra va a ser mucho mayor", añade.
También puede ayudar a las personas que estén divorciadas a la hora de abordar la custodia de sus hijos. Al pasar a ser mujeres, los hijos dejan de ser fruto de una relación heterosexual y pasan a serlo de una relación LGTBI, entre dos mujeres. Las madres no gestantes son, a efectos legales, tan madres como las biológicas.
De momento, sólo ha habido un caso conocido que haya llevado a cabo el cambio de sexo para evitar la aplicación de la ley de violencia de género. Se trata de un Policía Local, el primero en toda Ceuta que solicitó el cambio de sexo, que fue detenido por un delito de malos tratos continuados contra su pareja. Este, sin embargo, se encuentra actualmente en prisión.
¿Por qué en Ceuta?
Hay varios motivos que explican que este fenómeno esté sucediendo especialmente en Ceuta. El primero, porque hay una comunidad muy elevada de miembros de las Fuerzas Armadas y de los cuerpos policiales, lo que implica que la posibilidad de cambiar de sexo y los beneficios que ello acarrea se extiende fácilmente a través del boca a boca. Por otro lado, porque no hay un juez encargado del Registro Civil en Ceuta.
En una resolución pionera, el juez del Juzgado de Primera Instancia 5 de San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria) denegó, el pasado mes de septiembre, el cambio de sexo a un opositor que trataba de conseguir un empleo público. El togado era el responsable del Registro Civil.
La resolución concluía que el opositor estaba actuando con "ánimo espurio". "Se extrae con contundencia del hecho de que manifieste que se siente mujer desde siempre y que no se lo haya comentado a familiares y amigos. Es del todo incongruente y contrario a máximas de la experiencia que una persona que se siente mujer lo manifieste a través de la rectificación del sexo en el Registro Civil antes de compartirlo con familiares y allegados", rezaba el auto.
En el mismo se destacaba también que había mantenido su nombre registral, de la misma forma que está pasando en Ceuta, aunque en la ciudad autónoma todavía no se ha llevado a cabo ningún tipo de acción judicial.
Ese mismo mes de septiembre, el mismo órgano judicial de Canarias concluyó lo mismo respecto a otro hombre que pedía modificar su sexo registral y ser llamado Anarkia Gnosia. Consideraba el juez que no era una persona trans y que "al carecer de la condición de persona transexual, dotar al solicitante del sexo femenino, beneficiándose de las medidas de discriminación positiva, es un resultado contrario al ordenamiento jurídico, incardinable en los términos del fraude de ley".
Esto, sin embargo, no puede suceder en Ceuta, ya que la máxima autoridad legal en el Registro Civil es un letrado de la Administración de Justicia, que además está en el puesto de manera temporal. Si esta persona se dedicase a rechazar los cambios de sexo, podrían acabar imputándole un delito de prevaricación.
"Antes estaba bien regulado y era más fácil ver quién era trans y quién no, pero la nueva ley no te permite ningún margen de maniobra. Estamos deseando que salga alguna resolución que siente jurisprudencia sobre este tema para poder atajarlo", lamentan las fuentes jurídicas.
En el conjunto de España, a lo largo de 2023 se tramitaron más de 5.000 cambios de sexo registrales en aplicación de la Ley Trans. En la mayoría de los casos, el 60%, la transición se hizo de hombre a mujer.