Prohens pacta varios decretos con el PSOE y mantener la Ley de Memoria, y deja para marzo el adelanto electoral en Baleares

Lo pactado con los socialistas es la convalidación de unos textos legislativos que pretenden corregir unas enmiendas que Vox logró colar en la Ley de Simplificación Administrativa hace dos semanas. Un error en la votación de los populares dio vía libre a estas medidas y, a pesar del acuerdo unánime de la Cámara, Vox se desmarcó y fue el único grupo parlamentario que se negó a repetir la votación.

Todo y a pesar de que entre PP y Vox se había pactado, previamente, el rechazo de los populares a esas medidas. Y que los de Santiago Abascal las presentaran solo a nivel testimonial "para mantener el compromiso con los votantes y el programa electoral".

Efe

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Todo esto llegó después de que el partido de derecha radical hubiese anunciado ya su nula disposición a aprobar los presupuestos autonómicos para 2025 del Gobierno de Prohens. Según fuentes populares, "lo hicieron sin aportar argumentos", dado que la política migratoria -excusa esgrimida desde la dirección nacional de Vox- "aquí no tiene sentido, ya que en esta Comunidad no podemos aceptar más menas".

En todo caso, el PP insistió en mantener la estabilidad y darle una oportunidad a la negociación con los grupos. "El PSOE, evidentemente, aunque se sienta a hablar, no nos va a votar los presupuestos, y Vox ni siquiera se quiere sentar". Y es que la formación conservadora ha planteado un ultimátum a Prohens: cualquier iniciativa para tirar abajo sus enmiendas será la ruptura definitiva.

Por eso, el PP ahora ha pactado con los socialistas. Y no solo retirarán vía decreto las enmiendas introducidas por Vox, votando juntos los dos grandes partidos. También apoyarán los populares al PSOE en la votación de la semana que viene para evitar la derogación de la Ley de Memoria Democrática de las islas, promulgada durante el mandato de Francina Armengol.

"Nosotros no llevábamos eso en nuestro programa, era cosa de Vox", y el PP sólo lo había aceptado como parte del acuerdo de investidura. "Así que si ellos dan por rotos nuestros pactos, nosotros también", explican fuentes oficiales del entorno de Prohens.

Llamada a Génova

La baronesa popular ya ha contactado con la dirección nacional de Alberto Núñez Feijóo, para informar de la situación política de las islas, que se aboca "al bloqueo total". Desde Génova se le ha transmitido a Prohens todo el apoyo "y la confianza en que es ella la que conoce mejor que nadie qué es lo más conveniente, elecciones anticipadas incluidas". 

De momento, según ha podido confirmar este periódico, el PP balear va a dejar pasar la Navidad. "Como en Baleares no tienen capacidad de decisión propia y todo depende de lo que digan Abascal y Jorge Buxadé desde Madrid", explican con cierta sorna las fuentes consultadas en el PP, "tal vez se den cuenta en un par de meses de que nadie los vota para darle al PSOE la oportunidad de tomarse la revancha y recuperar un Govern que perdieron hace año y medio".

Por eso, Prohens pretende esperar hasta el próximo periodo de sesiones, que comenzará en febrero, para tomar la decisión definitiva de convocar elecciones anticipadas. Las perspectivas son positivas para el PP, dado que los sondeos le dan mayoría absoluta. Y además, la ley electoral de las islas le otorgaría un periodo completo de cuatro años para desarrollar su programa.

Otras CCAA del PP

En eso, Baleares funciona como Castilla y León, donde Alfonso Fernández Mañueco, de momento, se sigue negando a responder a la pregunta de si adelantará elecciones, pese a encontrarse en un brete similar con sus antiguos socios de Vox. "Hasta el PSOE ha anunciado que se sentará a negociar las cuentas del año que viene", explica un portavoz cercano al presidente autonómico del PP. "Pero Vox se niega, exigiendo en una carta que impulsemos no sé qué cosas... que son de política nacional".

Sin embargo, la situación de Prohens sí se diferencia de territorios como Extremadura, donde la presidenta popular María Guardiola se encuentra en una situación aún más comprometida. Vox tampoco quiere sentarse a negociar las cuentas del año 2025, y en su caso no le valdría ni siquiera la abstención, ya que la oposición tiene más escaños que el PP, y no habría más síes que noes en el Parlamento, en ningún caso.

El PP está decidido a apostar por la estabilidad, "frente a una Moncloa que ni gobierna ni deja gobernar a las CCAA". Por eso, oficialmente se rechaza la posibilidad de más adelantos electorales. Entre otras cosas, porque "podría parecer que lo hacemos por conveniencia, y hace falta que el ciudadano entienda quién sería el culpable de esta situación".

Aun así, ambos gobiernos, el de Mañueco y el de Guardiola, podrían tomar la misma decisión que el de Prohens, y hacer coincidir sus convocatorias electorales para la primavera, según las fuentes consultadas.

Por su parte, el Gobierno de Aragón, presidido por Jorge Azcón, y el de la Región de Murcia, que lidera Fernando López Miras, sí que rechazan de plano cualquier opción de adelanto electoral. Éstas son las otras dos regiones donde Vox rompió la coalición de Gobierno el pasado mes de julio, culpando al PP de "plegarse al sanchismo" por pactar la reubicación de 347 menores extranjeros no acompañados procedentes de Canarias y de Ceuta.

El entorno de Azcón, de hecho, no ha iniciado ninguna negociación "a la espera de que Pedro Sánchez y María Jesús Montero aclaren si van a quitarle 87 millones de transferencias a los aragoneses". De momento, se prorrogarán las cuentas de 2024, "que han permitido traer miles de millones de inversión extranjera, así que no es el escenario ideal, pero los presupuestos son buenos".

Desde el gabinete de López Miras ni siquiera entran a valorar la posibilidad de llamar a las urnas: "Los murcianos ya votaron mucho en 2023: municipales, autonómicas, generales... y ahora las europeas. Está claro su mandato, y Vox será quien daba explicar qué ha cambiado del año pasado a éste".