El emprendedor e inversor en nuevas tecnologías Bernardo Hernández ha asegurado que el sector financiero tiene todavía por delante un gran potencial para avanzar en innovación en el ámbito digital. Sin embargo, ha advertido que, para que esto sea posible, es necesario un nuevo enfoque de la regulación que "deje respirar" esa innovación.

Durante su intervención en el II Observatorio de las Finanzas, organizado por El Español e Invertia, Hernández ha admitido que el trabajo que desempeñan los reguladores del sector financiero, como la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) o el Banco de España, a la hora de salvaguardar los entornos financieros y proteger a los usuarios es "extraordinariamente importante". 

En este sentido, ha señalado que es lógico que los reguladores sean "escepticos", ya que están haciendo su trabajo al velar por la seguridad de los usuarios. Sin embargo, también ha agregado que si la regulación se aplica con criterios diseñados para escenarios de hace 30 años, la innovación no va a poder crear cosas distintas y más eficientes.

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En este sentido, ha asegurado que si se permite que la innovación tenga "espacio suficiente" para crear nuevos paradigmas, es posible que preservar al mismo tiempo un elevado mismo nivel de protección de los usuarios. "Los reguladores deben permitir que la innovación respire", ha incidido.

Pese a esta petición, Hernández también ha querido reconocer la iniciativa en la buena dirección que han sido los sandbox financieros puestos en marcha en España, que están ayudando a crear un entorno regulatorio "más laxo" que permita hacer cosas pequeñas, pero "muy nuevas". 

No obstante, ha asegurado que "hay que hacerlo más" y favorecer una mayor libertad para que la innovación haga cosas distintas y se apliquen criterios regulatorios distintos. De hecho, ha remarcado que ya existen ejemplos en varios países, incluido España, de que es posible crear productos de éxito y muy innovadores, y al mismo tiempo seguros, con un nivel de fraude muy bajo y unas buenas dinámicas de control.

"Es importante que se mantenga esa esencia de un control muy prudente y escrupuloso de los reguladores de la calidad de lo que se hace, pero con consciencia de que la innovación necesita libertad", ha subrayado el ex consejero delegado de Verse.