María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública en funciones.
El impuesto a los ricos se suma a la tasa Google y la Tobin y no recauda ni la mitad de lo previsto por Hacienda
Las medidas tributarias estrella desde que Sánchez llegó a la Moncloa se quedan muy lejos de las expectativas
21 septiembre, 2023 03:37El Gobierno presentó el Impuesto de Solidaridad de las Grandes Fortunas (también conocido como el impuesto a los ricos) como una de las medidas estrella del año pasado. Con la excusa de mejorar la justicia fiscal (y, de paso, anular la bonificación del impuesto de Patrimonio en regiones como Madrid y Andalucía), el Ministerio de Hacienda pronosticó unos ingresos que estarían en los 1.500 millones anuales.
Sin embargo, la recaudación se ha quedado en unos escasos 623 millones, menos de la mitad. Y no es la primera vez que sucede con las iniciativas fiscales del Gobierno.
No ha tenido fortuna el equipo de María Jesús Montero cuando ha activado algunas nuevas figuras tributarias. O, más bien, no ha estado atinado en sus pronósticos de recaudación. Los ingresos por figuras tributarias creadas bajo los mandatos de Pedro Sánchez se han quedado muy lejos de lo esperado.
El caso del Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales y el Impuesto sobre Transacciones Financieras, más conocidos como las tasas Google y Tobin, respectivamente, sirve de ejemplo. Desde que Montero se hizo con los mandos de Hacienda, el Ejecutivo socialista planeó su aprobación con importantes cifras de recaudación.
Por un lado, por la tasa Google se calcularon unos ingresos de 968 millones de euros anuales, mientras que por la Tobin se pronosticaron 850 millones. 1.818 millones, en total.
Sin embargo, una vez se pusieron en funcionamiento ambos impuestos, los ingresos quedaron muy lejos de las cantidades citadas. Google y Tobin ingresaron 462 millones de euros en 2021 y 474 millones en 2022. Un 15% de lo que Hacienda había estimado en un principio.
Desde el Ejecutivo se alegó que estas diferencias de ingresos se debe, sobre todo, a los cambios que sufrieron ambos impuestos durante su tramitación legislativa y a que las previsiones se hicieron antes de la pandemia.
Redactado
En caso de la tasa a las Grandes Fortunas, durante el trámite legislativo no registró grandes cambios. Sin embargo, esta figura tributaria dejó abierto un boquete en su redactado. Permite a las grandes fortunas deducirse hasta un 80% del impuesto gracias a cómo se computa el llamado escudo fiscal.
Lo cierto es que este impuesto ha recaudado sólo un 41% de lo estimado por el Ejecutivo. Así, los pronósticos de Hacienda han sobredimensionado en 2.221 millones de euros al año el alcance de Grandes Fortunas y de las tasas Google y Tobin.
Expertos en fiscalidad consultados por EL ESPAÑOL-Invertia recuerdan que es muy arriesgado determinar previsiones de ingresos elevadas por impuestos nuevos sin conocer su comportamiento en el mundo real y las mecánicas que les puedan afectar.
Ahora queda conocer qué ocurrirá con el nuevo impuesto a la banca y a las empresas energéticas. Este miércoles se cumplió el plazo para abonar el segundo plazo de este tributo. Y, en su caso, Hacienda espera que incluso se superen los 3.000 millones de euros al año en recaudación.
Sin embargo, en estos casos, ambas figuras están sujetas a datos de facturación, lo cual habría permitido contar con mayor previsibilidad.
Finalmente, queda el impuesto especial al plástico (que parte de la Ley de Residuos) y que también se ha activado este mismo año. En este caso, sí que se va a cumplir el pronóstico. Y puede que con creces. Hasta julio ingresó 345 millones de euros, y lo previsto son 500 millones.
