Paso atrás del Ministerio de Energía: recorta en 1.000 MW la subasta de renovables
El ministro Álvaro Nadal anunció una subasta 3.000 megavatios (MW) 'verdes' que, ahora, se reduce a 2.000.
9 marzo, 2017 10:42Noticias relacionadas
El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital ha elaborado un borrador de resolución con los detalles de la próxima subasta de potencia renovable en el que contempla la licitación de 2.000 megavatios (MW) 'verdes', frente a los 3.000 MW anunciados por los responsables del departamento.
El borrador de la resolución, al que ha tenido acceso Europa Press, indica que "se otorgarán derechos económicos para un máximo de 2.000 MW de potencia instalada", si bien añade la posibilidad de que pueda ampliarse esta potencia conforme a unos criterios no definidos.
La potencia máxima será de 2.000 MW "sin perjuicio de lo establecido en el anexo confidencial que regula un procedimiento por el cual en determinados supuestos se podrá incrementar la potencia asignada prevista en esta subasta", afirma el borrador de la resolución. Hace unos meses, el ministro Álvaro Nadal anunció durante una comparecencia en el Congreso de los Diputados que la subasta de energía 'verde' alcanzaría los 3.000 MW.
El texto también recoge un descuento máximo en la presentación de las ofertas en función de diferentes tecnologías. Este "valor máximo del porcentaje de reducción del estándar de la inversión inicial de la instalación tipo de referencia ofertado" será un elemento que evite la presentación de ofertas temerarias, según fuentes del sector.
Estos porcentajes, adelantados este jueves junto con el contenido de la resolución por El Economista, se sitúan en el 66,01% en el caso de la eólica, en el 59,84% en el de la fotovoltaica y en el 98,94% en el resto de tecnologías.
Esta resolución se suma a la remitida esta semana al sector en la que se recogen los detalles del proceso. Entre las novedades, figura la posibilidades de presentar ofertas negativas y el fuerte incremento de los avales, que se triplican.
La subasta utilizará un sistema marginalista en el que los interesados pujarán a la baja hasta completar la bolsa de megavatios en juego. Las ofertas se irán ordenando de más barata a más cara, y la última en llenar el cupo será la que marque el precio para el conjunto.
Los interesados podrán hacer ofertas negativas para entrar a toda costa en el cupo. Este valor negativo de las ofertas será una señal de que el inversor no solo no generará un sobrecoste al sistema eléctrico, sino incluso un ahorro.
De cualquier forma, en caso de que las ofertas sean negativas, se tomará el valor cero. Las fuentes del sector indican que, de este modo, se incentivará aun más la competencia y se reducirá la probabilidad de que se produzcan empates.
En cuanto a los avales necesarios para participar, pasarán de los 20 euros por cada kilovatio (kW) incluidos en la primera subasta a un valor tres veces superior, de 60 euros.
Tecnología neutral
Las nuevas subastas serán tecnológicamente neutrales, de modo que podrán competir todas las fuentes de generación renovable. Esta circunstancia difiere de lo ocurrido en la primera subasta, en la que se pusieron en juego 700 megavatios (MW), de los que 500 MW eran eólicos y los 200 restantes, de biomasa.
Otra de las novedades de la nueva subasta es que se podrá ofertar en bloques de un tamaño máximo de 100 MW, mientras que anteriormente el máximo de la puja era de 50 MW.
También se incluye la novedad de que, en caso de empate, se tomará el proyecto que genere más megavatios hora por cada megavatio instalado, conforme al número de horas de funcionamiento.
En sobre cerrado
Las ofertas se seguirán realizando en sobre cerrado y conforme a las inversiones previstas, pero ahora se realizarán unos ajustes conforme a una fórmula para establecer el sobrecoste que los diferentes proyectos generarán al sistema eléctrico.
Una vez se conozcan el valor de la inversión inicial y el resto de parámetros retributivos, se calculará para cada oferta la retribución a la inversión y el cociente entre esta retribución a la inversión y el número de horas estándares de funcionamiento.
Las ofertas se ordenarán, con independencia de la tecnología, de menor a mayor valor de dicho cociente y resultarán adjudicatarias de la subasta las ofertas que tengan un menor cociente hasta alcanzar por defecto el límite de potencia que se establece en esta resolución.
Como resultado de la subasta, se obtendrá la potencia adjudicada a cada participante para cada tecnología, así como el porcentaje de reducción del valor estándar de la inversión inicial de la instalación tipo de referencia.
La referencia final de la subasta será "el porcentaje de reducción del valor estándar de la inversión inicial de la instalación tipo de referencia para nuevas instalaciones".