El conflicto de la estiba ya no existe en el Congreso pero sí en los puertos, donde desde la aprobación del real decreto este jueves se está viendo acrecentado. 

En cuanto salió adelante la reforma en la Cámara Baja para liberalizar el sector de la estiba como exige Bruselas, los sindicatos convocaron ocho jornadas de huelga alternas (lunes, miércoles y viernes) en horas impares entre el 24 de mayo y el 9 de junio, ya que, según denuncian, el decreto-ley "esconde un expediente de regulación de empleo para más de 6.000 trabajadores organizados y con capacidad de negociación colectiva".

Desde la patronal Anesco, y aunque tampoco comparten la convalidación del texto, han denunciado que esas huelgas ya se están produciendo de forma encubierta en los puertos españoles. "Se continúan realizando intolerables medidas de presión, con bajadas de rendimiento en la mayoría de las terminales españolas lo que constituye un acto de huelga encubierta e ilegal, que perjudica gravemente a las empresas del sector y al conjunto del sistema portuario", denunciaba la patronal.

La reunión para evitarlas, el lunes

Sin embargo, está dispuesta a negociar con los trabajadores para intentar parar las huelgas convocadas, que tendrían graves efectos sobre el trabajo en los puertos. En este sentido, este mismo viernes, Anesco ha convocado a una reunión de la Comisión Paritaria Sectorial Nacional, el órgano compuesto por la representación de las empresas y por las organizaciones sindicales más representativas del sector que tiene entre sus funciones la resolución de conflictos laborales.

En este encuentro, fijado para el próximo lunes 22 a las 16 horas, tratarán de buscar soluciones ante la convocatoria de huelga anunciada. "Hacemos un llamamiento al diálogo y muestra su voluntad de llegar a acuerdos satisfactorios para todas las partes implicadas", insisten.