El presidente de Freixenet, Josep Lluís Bonet, ha afirmado este miércoles que volverá a proponer al consejo de administración de la compañía trasladar el domicilio social, actualmente ubicado en Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona), si el resultado que surja de las elecciones catalanas del 21 de diciembre no aporta seguridad jurídica y estabilidad.
"Se debe aceptar el resultado. Si la estrategia que lleva el país es de normalidad, seguridad jurídica y estabilidad, perfecto. Si se desvía a otra cosa, volveré a poner el cambio social en el orden del día", ha dicho Bonet en una sesión de Dinars Cambra, en la que ha participado como presidente de Fira de Barcelona.
Bonet ya avisó de que propondría trasladar la sede social de Freixenet fuera de Cataluña, pero la aplicación del artículo 155 de la Constitución y la convocatoria de elecciones catalanas por parte del Gobierno español le hizo cambiar de opinión y mantener la sede en Sant Sadurní al considerar que se había vuelto a la "senda constitucional".
En este sentido, Bonet ha apostado por el "camino catalán" y ha reivindicado las raíces catalanas de la multinacional del cava: "Es lo que hemos sido durante más de 100 años. ¿Saben cuánto duele irse?".
"Somos catalanes, españoles y europeos. Somos catalanes primero y queremos seguir aquí, pero si el 21-D fuera en contra de los intereses de Freixenet, volvería a proponer al consejo el cambio del domicilio social", ha dicho Bonet en declaraciones a la prensa tras el coloquio.