bancos_logosok

bancos_logosok

Banca

Por la puerta grande: la banca vive su mejor semana bursátil desde 2016

  • El sector ha salido más que airoso de las 'embestidas' del IRPH y el BCE
  • Bankinter, CaixaBank y Banco Sabadell suben más de un 10% en la semana
14 septiembre, 2019 06:00

Noticias relacionadas

Era una semana binaria. Al todo o nada. De revolcón o puerta grande. Y ha acabado siendo de puerta grande. El sector bancario, tan castigado en el parqué en los últimos meses y años, afrontaba la segunda semana de septiembre con el miedo en el cuerpo porque le esperaban dos 'miuras' astifinos con capacidad de causarles un estrago aún mayor. El primero era el 'caso IRPH', sobre el que tenía que pronunciarse Maciej Szpunar, Abogado General del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE); el segundo, la reunión de política monetaria del Banco Central Europeo (BCE). El primero asustaba porque podía allanar el camino hacia un impacto de decenas de miles de millones de euros para el sector por el uso incorrecto y abusivo de ese índice hipotecario; el segundo, porque la institución presidida por Mario Draghi tenía en el horno una nueva  e inquietante rebaja de los tipos de interés. 

Una semana de pasión. Bajista o alcista. Y ha terminado siendo alcista, la más alcista de los últimos años. El más 'tímido' de los bancos del Ibex ha sido Bankia, con una revalorización semanal del 5%. Este año ya ha tenido varias semanas mejores. En el resto hay que ir bastante más atrás en el tiempo. BBVA, que ha sumado un 8,4%, no sumaba tanto en una única semana desde 2017. Hasta 2016 hay que remontarse para ver semanas mejores en Banco Santander (+8,2%), CaixaBank (+12,5%) y Banco Sabadell (+14,1%). En el caso de Bankinter, su revalorización del 10,7% es la mayor desde 2014. 

DE ALIVIO EN ALIVIO

Tras semejantes subidas, esos dos 'morlacos', finalmente menos fieros de lo temido. El primero, el pronunciamiento del Abogado General sobre el 'caso IRPH'. Si bien Szpunar ha abierto la puerta a que los clientes puedan ir a los juzgados para reclamar por el uso abusivo o poco transparente de esta referencia hipotecaria, también ha concedido motivos al sector bancario para pensar que el impacto final, calculado en el peor de los escenarios en hasta 60.000 millones de euros, será menor al previsto y en cualquier caso asumible para las entidades. Por ahora, solo se trata de un pronunciamiento no vinculante, y será el TJUE el que emitirá el fallo definitivo a comienzos de 2020, pero las conclusiones del Abogado General, conocidas el martes, terminaron siendo bien acogidas por el sector en bolsa.

Dos días después llegó la segunda palanca alcista para el sector. La proporcionó el Banco Central Europeo (BCE), que envió varios 'caramelos' al sector para no dañar tanto su rentabilidad con su expansiva política monetaria. La entidad presidida por Mario Draghi rebajó los tipos de interés de la facilidad de depósito en 10 puntos básicos, hasta el -0,50%, pero introdujo en paralelo una medida para paliar el efecto de este recorte en la banca.

Desde finales de octubre, el exceso de liquidez dejará de estar penalizado por igual, como ocurre ahora, en el que todo el dinero que le sobra al sector paga el 'peaje' del interés al que están los tipos de depósito. A partir de ese momento, regirá un sistema con dos niveles ('tiering'), por el cual una parte sustancial de ese exceso de liquidez -con los datos actuales, cerca del 50%- quedará exento de esa penalización. Vamos, que los tipos negativos serán costando dinero al sector, pero menos que antes y, sobre todo, mucho menos que si el  BCE no hubiera introducido este paliativo. 

En combinación con otras medidas anunciadas por el BCE, como la reanudación de las compras de activos (QE2) y la mejora de las condiciones de su nuevo programa de financiación bancaria a largo plazo condicionada a la concesión de crédito (TLTRO III), este 'tiering' fue muy bien respondido por los bancos en bolsa tanto en la recta final de la jornada del jueves como, sobre todo, en la del viernes, con revalorizaciones comprendidas entre el 2,5% que se anotó el Santander y el más del 7% que sumaron CaixaBank y Banco Sabadell. 

"El 'tiering' o jerarquización de la facilidad de depósitos aplicada a los bancos que se ha introducido es positivo para el sector bancario. Es un gran apoyo para los bancos a pesar del recorte de la facilidad de depósito", constata Mondher Bettaieb, director de crédito corporativo de Vontobel AM.

AÚN EN ROJO... Y CON POTENCIAL

Pese al rebote de la última semana, que prolonga en también la reacción que el sector viene firmando desde finales de agosto, los 'números rojos' anuales aún son la norma. La excepción corresponde a BBVA, que sube un 5% en 2019. En el resto mandan las caídas: Banco Santander cede un 3,8%; Banco Sabadell, un 8,8%; Bankinter, un 13,2%; CaixaBank, un 24%; y Bankia, un 31%. 

La 'norma' también es que estas caídas han dejado un considerable potencial alcista a ojos de los analistas, que sitúan los precios objetivos de las entidades por encima de las cotizaciones actuales. Según el consenso de mercado que recoge Refinitiv (antiguo Thomson Reuters), el potencial de Bankinter es del 13,5%, hasta los 6,92 euros; el de BBVA, del 14,5%, hasta los 5,57 euros; el del Sabadell, del 17,3%, hasta los 1,07 euros; el del Santander, del 24%, hasta los 4,74 euros; el de CaixaBank, del 28%, hasta los 3,08 euros; y el de Bankia, del 26,5%, hasta los 2,23 euros.