La nueva Comisión Europea, a favor de potenciar la nuclear: prepara una Ley que le abra la puerta a las ayudas de la UE
Von der Leyen, al frente de la Comisión Europea cinco años más, se posiciona más en una política energética de "neutralidad tecnológica".
1 agosto, 2024 01:13La partida entre los países europeos pronucleares y los antinucleares está camino de finalizar a favor de los primeros. La Comisión Europea (CE) está considerando elaborar una "Ley Nuclear" que podría estar encima de la mesa para su discusión antes de que finalice el año 2024.
La nueva Comisión surgida tras las elecciones celebradas el pasado 9 de junio ha cambiado su enfoque para ayudar a las empresas del Viejo Continente a descarbonizarse y poder cumplir con los ambiciosos objetivos climáticos que se había fijado Bruselas.
El principal desafío que marcará el mandato de la reelegida presidenta europea, Ursula von der Leyen, será definir cómo la UE quiere seguir avanzando en la agenda de descarbonización con el horizonte 2030. Y a su vez no olvidar proteger la competitividad de la economía (y en particular de la industria) y asegurarse el suministro.
Durante años, los países de la UE han estado profundamente divididos sobre los beneficios de la energía nuclear. Francia ha liderado los países pronucleares, mientras que Alemania ha estado en el bando contrario. Y hasta hace poco, la energía nuclear estaba excluida de las políticas ecológicas.
Pero las preocupaciones sobre la seguridad energética, alimentadas por la guerra tras la invasión de Rusia en Ucrania, han provocado un resurgimiento del interés en el sector y, más aún, si aparecen nuevas soluciones, como los pequeños reactores nucleares (SMR o small modular reactor).
Neutralidad tecnológica
Coincidiría este cambio de timón con la propuesta que realizó en abril pasado el comisario de Mercado Interior Europeo, el francés Thierry Breton. Quería que se aprobara una Ley de Tecnologías Nucleares de la UE, como parte de los esfuerzos para desarrollar una industria nuclear integrada en Europa.
Eso abriría la puerta a uno de los anhelos del país galo: acceder a las ayudas europeas para la transición energética.
Y todo camina en esa dirección. Más aún tras conocer las prioridades señaladas por Von der Leyen en su discurso ante los eurodiputados durante la votación que la confirmó como presidenta de la Comisión Europea durante los próximos cinco años.
Dijo que su paquete climático del Pacto Verde debería avanzar con "neutralidad tecnológica", o lo que es lo mismo, abrir el enfoque para que la energía nuclear esté junto a las renovables en la elaboración de leyes.
Según ha podido saber este diario, el Ejecutivo europeo está trabajando en un nuevo plan para la energía atómica, pero se desconoce cuál será el alcance de esa ley. Y no sólo porque es difícil conocer los detalles iniciales, sino porque todavía quedaría un largo proceso legislativo que podría dar la vuelta al calcetín del texto original.
En cualquier caso, se espera que se lance un Clean Industrial Deal, que sería la continuación de su emblemático Green Deal y que se centrará en ayudar a las empresas a reducir sus emisiones.
Propuesta francesa
El comisario de nacionalidad francesa presentó por primera vez su concepto de "Ley de energía nuclear" el pasado 8 de abril frente a legisladores de los Comités de Energía e Industria y de Comercio Internacional del Parlamento Europeo. Entonces dijo que era necesario llevar la energía nuclear a "otro nivel", ya que "tiene un papel central que desempeñar en la compleja ecuación [entre] seguridad, sostenibilidad y competitividad".
Todavía es una incógnita saber cuál va a ser el resultado final de esa ley si llega a buen puerto. Pero coincide con el último anuncio de la energética estatal francesa EDF, que el pasado viernes aprovechó la presentación de sus últimos resultados financieros para presentar sus ambiciones nucleares: prevé que en 70 meses (casi seis años) esté construido un pequeño reactor SMR.
En Suecia, la energética estatal Vattenfall también acaba de decir que su objetivo es poner en funcionamiento un nuevo reactor nuclear en la primera mitad de la década de 2030. Una medida que forma parte de la decisión de Suecia de reinvertir en esa fuente de energía. En junio de 2022, lanzó un estudio piloto para la construcción de al menos dos pequeños reactores modulares (SMR) en la central nuclear de Ringhals, en el suroeste del país.
No son los únicos. Junto a Francia y a Suecia, hay otros nueve países miembros de la UE que tienen planes de continuar con la generación nuclear: Bulgaria, Croacia, Hungría, Finlandia, Países Bajos, Polonia, República Checa, Rumanía, Eslovaquia y Eslovenia, y que se han organizado en la Alianza Pro-Nuclear.
Por último, Nucleareurope, la patronal europea del sector, ha dicho que la nueva Comisión debería desbloquear dinero en el fondo de transición justa o el fondo de innovación y que se debería prestar más atención al hidrógeno de origen nuclear, al conocido como hidrógeno rosa.