El precio del petróleo Brent -la variante de referencia en Europa- sube un 9% este ejercicio, hasta situarse en torno a los 84,5 dólares por barril. A pesar del repunte, la situación es muy diferente a la de 2022, cuando el crudo del Viejo Continente superaba los 105 dólares.

Y algunas previsiones apuntan a que este escenario se extenderá al menos durante los próximos meses, periodo en el que sitúan el precio del crudo entre los 80 y los 85 dólares. Es decir, en niveles similares a los que cotiza en la actualidad.

En este escenario, el Ejecutivo ha revisado a la baja los supuestos básicos del escenario macroeconómico que sustenta el techo de gasto y la senda fiscal para el periodo 2025-2027, aprobada este martes y que es el paso inicial para empezar con la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2025.

Según dicho documento, el precio del crudo será de 84 dólares por barril en 2024. La cifra supone una reducción respecto a los 85 dólares previstos en el anterior cuadro macro, presentado el pasado octubre y que formaba parte del Programa de Estabilidad que el Ejecutivo envió a la Comisión Europea.

2.100 millones

Si se cumplen las previsiones del Gobierno, la factura que pagará España en 2024 por importar petróleo será casi 2.100 millones de euros inferior a la anticipada en octubre.

El país compra anualmente unos 450 millones de barriles, que, multiplicados por los 89 dólares estimados hace nueves meses, hubieran tenido un coste de 40.050 millones de dólares (unos 36.780 millones de euros al cambio actual).

Si hacemos la misma operación, pero multiplicando por los 84 dólares de la previsión actual nos sale un total de 37.800 millones de dólares (o unos 34.700 millones de euros). Es decir, una diferencia de unos 2.250 millones de dólares o 2.100 millones de euros.

Para incluir estas previsiones, el Gobierno, tal y como explicó el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, se basa en los datos de los mercados de futuros. Teniendo esto en cuenta, el Ejecutivo espera que el petróleo se sitúe en 85 dólares por barril en 2025, 2026 y 2027.

Gas

"Los mercados energéticos internacionales muestran relativa estabilidad en la primera parte del año. A pesar del complicado entorno geopolítico, desde comienzos de año la cotización del petróleo Brent continúa fluctuando entre los 80 y los 90 dólares apoyada en los recortes de la OPEP+", incluye el Gobierno en el Informe de situación de la economía española.

Asimismo, "en 2024 la cotización del gas parece haberse estabilizado en un nuevo nivel de equilibrio situado en el entorno de los 30-35 euros por megavatio hora (MWh)". El Gobierno cifra justo en el medio de esa horquilla de precios -32 euros por MWh- su previsión para este ejercicio. Supone una reducción de un euro respecto a la última estimación.

La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero; la ministra Portavoz, de Educación, Formación Profesional y Deporte, Pilar Alegría y el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo. Eduardo Parra Europa Press

Las previsiones casan con la situación actual del mercado, ya que el gas natural TTF -el de referencia en Europa- cotiza en la actualidad en torno a los 33 euros por MWh. En 2022 el precio superaba los 157 euros. De forma similar a la del Brent, el Ejecutivo apunta a que se mantendrá en torno a los 35 euros por MWh los tres próximos años.

"Finalmente, la evolución del precio mayorista de electricidad durante la primera mitad de 2024 ha sido particularmente favorable en comparación con 2023 apoyado en una buena climatología que ha llevado igualmente a un aumento de generación eléctrica con fuentes renovables", añaden en el citado documento.

Rentabilidad del bono

El Gobierno también menciona la situación de la política monetaria. "En los últimos trimestres se consolida el proceso de moderación de la inflación en la zona euro. En este contexto, el Banco Central Europeo (BCE) ha rebajado los tipos de interés de referencia 25 puntos básicos en junio de 2024", subrayan desde Moncloa.

"La rebaja era esperada por el mercado, que viene descontando el inicio de un nuevo ciclo de la política monetaria con más reducciones del tipo de interés a corto plazo en el horizonte de proyección", añaden.

Ante la perspectiva de más bajadas de las tasas de referencia, el Gobierno ha reducido del 3,7% al 3,2% la rentabilidad esperada del bono español a 10 años.

"En cuanto al tipo de cambio euro/dólar, no se esperan variaciones significativas en el horizonte de proyección" debido a que "el mercado también está anticipando bajadas de tipos de la Reserva Federal", subraya el Ejecutivo.

De esta forma, ha mantenido su previsión de que la divisa comunitaria rondará los 1,1 dólares tanto este como los tres próximos años.