Ante el reflejo de estos resultados, el Consejo General de Farmacéuticos junto con la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria y otras entidades como la Organización Nacional de Trasplantes han creado el proyecto 'Juntos' para mejorar la adherencia en los pacientes trasplantados.

Este plan, presentado este martes, ya ha arrancado en tres regiones: Cantabria, Baleares y en la ciudad de Santa Cruz de Tenerife.

Aunque en nuestro país es "poco frecuente que una persona fallezca por no adherencia, no podemos dejar de lado los resultados negativos del seguimiento. Por eso queremos preverlo, teniendo un control de los pacientes", ha señalado Beatriz Domínguez Gil, directora general de la Organización Nacional de Trasplantes.

Tanto los farmacéuticos comunitarios como hospitalarios, ante la preocupación por el resultado de la falta de adherencia, quieren llevar a cabo un seguimiento del paciente que se iniciará en los primeros seis meses después del trasplante.

Adherencia

El cumplimiento con toda la medicación es complicado para los pacientes porque llevan a sus espaldas una gran mochila. Al tratamiento se suman las citas médicas habituales, las analíticas y todos los demás medicamentos que tienen que tomar por los efectos secundarios que producen los inmunosupresores. 

Cuando un paciente se realiza un trasplante, necesita un seguimiento de por vida. Si no cumple con la adherencia a los medicamentos, puede correr el riesgo de sufrir enfermedades como la diabetes, numerosas infecciones de orina, además de hospitalizaciones y por consiguiente, el rechazo del órgano. 

Foto de familia de la presentación del proyecto 'Juntos'.

Como ha indicado Ana Sangrador, vocal nacional de Farmacia Hospitalaria, se observa que la falta de adherencia se empieza a incrementar un 21% a partir de los seis meses. Y, a los 18 meses después del trasplante, hay un gran pico de bajada y la situación empeora. 

¿Y cómo podemos mejorar esas bajas tasas? Pues, según ha matizado Domínguez Gil, se deberían de fomentar hábitos de vida saludable, además de ofrecer formaciones para concienciar a los pacientes de la importancia de cumplir con la medicación. 

Para la directora de la ONT, se deberían fomentar los dispositivos como recordatorios, simplificar la toma de inmunosupresores y "modificar los tratamientos para reducir los efectos secundarios".

"Si estamos coordinados, vamos a poder ofrecer una asistencia continuada a estos pacientes", ha precisado Ana Sangrador.

Puesta en marcha

Este estudio ha iniciado ya sus primeros pasos. El protocolo de identificación de pacientes comenzó a principios del mes de julio. Y como ha indicado Raquel Martínez, secretaria general del Consejo General de Farmacéuticos, tienen el objetivo de reclutar a 316 pacientes en un año. "Solo en 20 días hemos identificado a 14".

El proceso se hará a partir de dos vías. Primero, se aglutinarán los pacientes que acaban de recibir un trasplante. Y ya en una segunda dirección, a aquellos que recibieron un injerto hace 18 meses.

El protocolo de actuación va a durar tres años, concretamente desde este 2024 hasta 2027. En este proceso, como ha explicado Jesús Aguilar, presidente del Consejo General de Farmacéuticos, se van a monitorizar a más de 300 pacientes de cualquier órgano sólido. 

"Sus resultados van a avalar el trabajo conjunto entre los farmacéuticos hospitalarios y comunitarios. Y estamos seguros qué va a mejorar el índice de adherencia", ha detallado Aguilar.