El Gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso, por su parte, había planteado que el importe máximo a cobrar no superase el “50% sobre el precio base”. Además, ésta no es la única discrepancia entre la patronal VTC y el Gobierno autonómico madrileño: la patronal pide también poder imputar la responsabilidad de cobrar el precio correcto a la “empresa transportista” que realiza el viaje, es decir, Cabify, Uber o Bolt; o, “en su caso, a la persona física o jurídica que lo hubiera calculado”. El texto del proyecto, por contra, pide que esta responsabilidad se impute únicamente a los dos últimos.

Las patronales definen como “circunstancias excepcionales de alta demanda de servicios” los siguientes casos: “la declaración, por parte de la administración, de una alerta roja meteorológica, en la que se recomiende a los ciudadanos permanecer en casa o limitar de forma significativa sus movimientos”; y también “eventos de índole deportiva, cultural o social, con un potencial de atracción de viajeros (superior a 50.000 personas simultáneamente), que se celebren con carácter excepcional o sean convocados con una periodicidad anual o semestral, e involucren la salida concentrada del público en un mismo momento”.

[Las VTC quieren que los viajes de más de 25 euros se abonen por adelantado y APP diferentes a las del taxi]

En el documento se afirma que antes de que enero de 2024 finalice la Dirección General de Transportes creará un “calendario provisional de eventos que cumplan con estas características, a los que podrá añadirse posteriormente cualquier otro” que cumpla con características similares. Asimismo, debido a que la Ley establece que dichas limitaciones únicamente pueden aplicarse a circunstancias excepcionales, "se considera necesario establecer un criterio objetivo que dote de seguridad jurídica a los operadores, en relación a cuándo y en qué condiciones aplica la excepción a la regla general de libertad de precio".

Las patronales justifican su planteamiento en las alegaciones en la Ley 20/1998, de Ordenación y Coordinación de los Transportes Urbanos de la Comunidad de Madrid, que establece la “libertad de precios de los vehículos de arrendamiento con conductor (VTC) como regla general, que señala a continuación que, en situaciones excepcionales de alta demanda se podrá establecer por vía reglamentaria un incremento máximo, para evitar situaciones desmedidas para los usuarios”.

[Las normas de Ayuso para las VTC: indemnizaciones si cancelan el viaje y chóferes veteranos sin examen]

ASEVAL y UNAUTO exponen: “Las tarifas dinámicas existen en el sector VTC como una herramienta de gestión de oferta (que está limitada por ley) y demanda, ayudando a asegurar que en momentos de picos de demanda la oferta de servicios VTC sea suficiente. A través de las mismas, se pretende garantizar la cantidad óptima de vehículos disponibles en cada momento y lugar, en función de las necesidades”.

En el texto se explica que, de esta forma, cuando hay un pico de demanda ya sea durante eventos especiales, horas punta o en condiciones climáticas, estas tarifas sirven como incentivo para atraer a más conductores a la zona y poder asegurar así que quien necesita transporte pueda encontrar un vehículo.

Asimismo, ponen de manifiesto que en las horas de menor demanda, un precio más bajo permite estimular esa demanda de servicios, lo que ayuda a suavizar la caída de ingresos de los conductores.

En este sentido, se apunta que la restricción contemplada en el borrador, que limita al 50% el incremento de precios en circunstancias excepcionales de alta demanda, está promoviendo la "escasez de servicios justamente en momentos en los que se requiere de mayor oferta", lo que anula el mecanismo de la señal de precios y el incentivo que apareja.

"Un incremento del 50% se considera insuficiente, ya que limitaría la capacidad de ajuste del mercado, generando una mayor escasez de servicios", añade.

Por este motivo, se plantea un incremento máximo del 200% (equivalente a tres veces el precio), así como vincular dicho incremento a la evolución de los precios de las VTC en los 60 días anteriores para garantizar que éstos reflejan la evolución del mercado, que en la regla general está concebido como un mercado libre, facilitando el cumplimiento por parte de los operadores y su control por la Administración.

Mad Cool

Lo que la Comunidad de Madrid no quiere que se repita es el escenario que se dio en el Mad Cool 2023: los viajes en plataformas como Uber, Cabify o Bolt para ir o volver del festival fueron hasta cinco veces más caros de lo normal, según constató la consultora Games Econ en el estudio Efectos del festival de música Mad Cool sobre los precios de los servicios de taxi y VTC en la ciudad de Madrid encargado por la Federación Profesional del Taxi de Madrid (FPTM) y la Asociación Nacional el Taxi (Antaxi).

Dicho informe, que buscaba medir cómo afecta un evento masivo a los precios de los servicios de alquiler VTC y a los de taxi, concluyó que los viajes en VTC costaron de media entre dos y cuatro veces más que el precio mínimo normal, mientras que los trayectos en taxi subieron entre 0,2 y 0,4 veces. Estos aumentos, de hasta el 500% en algunos casos, dispararon el precio por desplazamiento por encima de los 130 euros.

Más barato que el taxi

La alegación de las patronales termina con la siguiente exposición: el 70% de los viajes en VTC son al menos un 30% más económicos que los de taxi. Además, cuanto más largos son los trayectos, mayor ahorro utilizando VTC en comparación con el taxi: más del 95% de los viajes en trayectos de más de 15 km en VTC son más baratos que el taxi. También durante la noche, fines de semana y festivos, cuando se aplica la Tarifa 2 del taxi, la VTC es más económica en un 90% de los casos.