Este miércoles 12 de abril amaneció la emblemática calle Marqués de Larios de Málaga con vehículos de la Guardia Civil aparcados en su acera peatonal para realizar un registro judicial en el despacho de un abogado penalista que acabó detenido.
Es una imagen poco habitual en una calle tan céntrica de la ciudad porque estamos acostumbrados a verlo en barrios que se nos vienen a la mente tras escuchar/leer que se ha producido un nuevo golpe contra el narcotráfico. Pero esta operación, sin duda, es mucho más importante que cualquiera de las que se pueda realizar en zonas habituales de venta directa de drogas porque trasciende a nuestra ciudad y a nuestro país, ya que se habla de grupos criminales con una liquidez que sobrepasan los cien millones de euros.
Tiene el sello de la Mafia Albanesa y eso son palabras mayores, ya que son clanes que en la última década son los principales aliados de la Ndrangheta (la mafia calabresa) y unas de las organizaciones criminales más extendidas en Latinoamérica y Europa.
Y eso quiere decir que tienen relación directa con los productores de cocaína. Precisamente a raíz de una incautación en enero del año pasado de 2.011 kilos de esta droga en el puerto de Algeciras se inició la investigación que ha desembocado en el auto del juzgado de instrucción nº 4 de Algeciras con la veintena de órdenes de detención y registros en varias provincias españolas.
Aquel alijo provenía del puerto Guayaquil (Ecuador), una ruta que controla a la perfección la mafia albanesa. Actualmente en el crimen organizado internacional quien controle Ecuador es dueño de las mejores rutas para colocar cocaína en Europa, América del Norte, África, Oceanía y Asia. Por eso el año pasado se incautaron 176 toneladas de cocaína en suelo ecuatoriano. Si contamos la droga que luego se rescató en otros puertos pero que inició su travesía desde Ecuador nos sale un valor de las mercancías que podrían arreglar el desaguisado en el Credit Suisse.
Básicamente, si una organización criminal pretende establecer o utilizar rutas en Ecuador debe hablar con la Mafia Albanesa/Ndrangheta, como si fueran sus franquiciados. Deben pagar un porcentaje por su utilización para que todos anden contentos.
El éxodo de narcos albaneses a Ecuador se gestó con el concepto de “ciudadanía universal” que implantaron con la constitución de 2008. No se necesitaba visado para acceder al país, y fue un caladero para que delincuentes buscados por la Interpol se introdujeran sin problemas en Ecuador. En 2022 ya se comenzó a solicitar visados desde Albania porque han sido cientos de mafiosos albaneses los que han podido entrar y salir de Ecuador cuando lo han necesitado.
Los Farruku en España
La Mafia Albanesa está presente en todas las provincias españolas y tienen diversificado su negocio de tráfico de drogas como nadie. En la operación de esta semana los registros y detenciones sucedieron en las provincias de Madrid, Málaga, Toledo, Barcelona y Cádiz.
La nota de prensa de la Policía Nacional nombra al clan Farruku albanés como el centro de toda operación. Es una organización asentada en nuestro país al menos desde 2008, y fue sospechosa de los llamativos asaltos a la casa del productor José Luis Moreno y de dos asesinatos en Madrid. Una de las víctimas era en 2010 el capo de la organización, lo acribillaron unos sicarios a tiros el 22 de enero de ese año mientras conducía un vehículo cerca de la glorieta de Francisco de las Cabezas del distrito San Blas de Madrid. Se trataba de Dimitrio N.
Ese hueco en el escalafón del clan lo tomó supuestamente Kreshnik Farruku, que ya fue detenido anteriormente en 2019 en un hotel cerca de la Castellana (Madrid). La detención se produjo por una orden de Italia por delitos de narcotráfico, y se le vinculó con aquel asesinato ocurrido en San Blas en Madrid aunque el autor principal fue un sicario albanés llamado Devi Kasmi. A esta persona la liquidaron en 2018 en la calle Kongresi i Manastirit de Tirana, la capital de Albania. En 2021 la fiscalía de la capital albanesa incautó a sus familiares 37 inmuebles valorados en varios millones de euros. Kasmi traficó con cocaína en Italia, Francia y en España, y parece que le fue bien económicamente hasta que ajustaron cuentas con él.
Quien le disparó en la cabeza fue Efthimios Efthimiu. Aunque tiene nombre de un portero veterano del AEK de Atenas es un exmilitar de las fuerzas especiales griegas. Está condenado por estos hechos a cadena perpetua en Albania.
Ajustes de película
Si hay tipos a los que otros criminales temen esos son los mafiosos albaneses, y tienen cientos de motivos para sentir miedo de ellos. En cualquier trato con la Mafia Albanesa no hay margen de error, quien falla paga. Y si no tienes liquidez para saldar tu deuda o traicionas a un grupo estás muerto. Suena simple, pero el funcionamiento interno de los clanes albaneses es un reloj suizo. El pasado septiembre en la ciudad albanesa de Durrës intentaron asesinar a un conocido narco con un tiro de un rifle francotirador. En esa ocasión fallaron, pero son las menos porque son profesionales en lo suyo.
Otro ejemplo llamativo ocurrió esta semana con un intento de asesinato de un político local albanés con un atentado con coche bomba en Vau i Dejës (Albania). Milagrosamente escapó ileso aunque le habían colocado 50 kilos de explosivos en el vehículo.
La presión que puede ejercer la mafia albanesa en política y en los medios de comunicación es tal que a finales de marzo un guardia de seguridad del principal canal de TV privado del país murió tras ser disparado desde un vehículo en marcha. Lo mataron con un Kalashnikov mientras estaba en la entrada del edificio de Top Channel en Tirana.
Las últimas apariciones
La Mafia Albanesa en España no descansa. El pasado mes se detuvo a un albanés en Adra (Almería) sospechoso de asesinar a tiros a un serbio y herir a otra persona de esta nacionalidad el pasado julio en la presa de Rules (Granada).
Aquello sucedió en una cita que reunió a tres albaneses, dos serbios y un polaco. No han trascendido los motivos del desencuentro pero quien decidió reunirse en aquel paraje no parece que fuera un amante del senderismo.