Cortes en las fuentes para beber y prohibición de regar con agua potable: las medidas de Málaga contra la sequía

La situación que vive España en general, y la provincia en particular, a causa de la sequía obliga a poner en marcha nuevas reestricciones. Tras la deliberación acordada por la comisión de seguimiento de la sequía de la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Málaga ha anunciado este jueves las nuevas restricciones que entran en vigor en la capital para minimizar en un 20% el abastecimiento urbano. 

Este hecho se hace especialmente visible en el sistema Guadalhorce-Limonero, donde se ha declarado el estado de escasez severa. Es por ello por lo que el bando municipal, que saldrá publicado en los próximos minutos, recoge la prohibición inmediata de usar agua potable para el baldeo de calles; llenado de piscinas privadas; riego de jardines privados o públicos y campos de golf; lavado de coches fuera del luego autorizado; fuentes ornamentales sin circuito cerrado así como duchas y surtidores públicos. 

El incumplimiento de estas medidas podrá conllevar una sanción por parte de la Policía Local de hasta 6.010 euros (en caso de infracciones leves), tal y como se recoge en la ordenanza municipal del ciclo integral del agua. 

Cabe señalar que la limpieza viaria y el baldeo de calles ya se viene realizando con agua del freático, aunque el plan contempla reducir los servicios mediante vehículos minihidro. Los servicios pasarán de 134 a 79 (un 41% menos) y las acciones de limpieza se centrarán en la eliminación de manchas en vez de actuar por toda la superficie. No obstante, alertan que se mantendrá intacto el servicio de limpieza en zona de la movida juvenil; es decir, en los entornos cercanos a los lugares de fiesta. 

Desgranando las restricciones, este bando incluye la interrupción de las fuentes para beber, aunque su uso apenas representa el 0,057%. Lo mismo pasa con las duchas de la playa, cerradas desde el 8 de agosto y con una representatividad del consumo del 0,24%. 

Una de las medidas que más efectos va a generar es la que tiene que ver con el regado de parques y jardines. En verano ya se redujo a la mitad el uso de agua potable, aplicándose actualmente un 95% de agua del freático, pero a partir de ahora su prohibición será total. Para evitar afectar a especies arbóreas, los esfuerzos se centrarán en la suspensión del ciego de praderas de césped.

Planes preventivos

Otro aspecto que señalan es el de la búsqueda y reparación de fugas por parte de Emasa. Actualmente se ha podido intervenir en 25 puntos donde había indicios de pérdida y recuperar el volumen de 60 litros por segundo, lo que supone un 3,85% del caudal medio diario del último mes.

También se va a reducir la presión del agua en algunos sectores de la ciudad. En los puntos donde ya se han instalado equipos de control se ha logrado un ahorro de 4,5 litros por segundo; lo que supone un 0,29% del total. Por último, se apunta que van a continuar utilizando pozos de Aljaima y Fahala con el objetivo de conseguir aportes alternativos. 

Medidas más duras

La propia concejala responsable del área de Medioambiente, Penélope Gómez, ha asegurado que si no lloviera lo mismo que el año pasado, solo se podría garantizar el consumo para un año más.

También apunta que, a día de hoy, el abastecimiento está garantizado por las medidas de reducción de consumo impuestas desde el Consistorio a través de la empresa municipal Emasa. 

Sin embargo, ha avisado de que podrían adoptarse medidas todavía más drásticas si el grado de escasez, marcado por el nivel de los embalses, siguiera aumentando. La línea roja la marcan los 71 hectómetros cúbicos de los embalses, por lo que si se bajara de esa franja, se entraría en estado de sequía grave.