Cuenta atrás para el descenso del Málaga CF (0-1)
El Málaga cae contra el Racing de Santander, un rival directo que le gana el goal average y lo deja a diez puntos de la salvación.
5 marzo, 2023 20:38Noticias relacionadas
Cuando acabó el partido, la realización enfocó a un joven aficionado malaguista que seguía sentado en su asiento y lloraba. Después las cámaras se iban a por otro que también lloraba. Camino del vestuario, Fran Sol contenía las lágrimas y se tapaba la cara con la camiseta. El Málaga CF acababa de perder contra el Racing de Santander por 0-1, tras otro tiro en el pie, otra vez Genaro, y ponía pie y medio en Primera RFEF.
La jugada que marcó el choque fue la expulsión del '16' blanquiazul nada más empezar la segunda parte. Llegó tarde, y un severo Moreno Aragón lo puso de nuevo enfilando los vestuarios de los que acababa de salir. Fue la puntilla para el Málaga, que siguió con la inercia para ir a por el partido y llegó lo que tenía que llegar, el gol de Íñigo Vicente, actor principal en la jugada de Genaro, y el dejarse ir hasta el final, sin paciencia, sin convencimiento, y con cara de descenso.
A Pellicer le gustó lo que vio en Granada y no tocó el once, salvo con la entrada de Luis Muñoz por el lesionado Febas. Con eso, mantuvo el doble pivote formado por Escassi y Genaro, con Lago Junior en la derecha y Fran Villalba en la izquierda. Muñoz se descolgaba en ataque donde jugó de '9' Rubén Castro.
La Rosaleda, tras el homenaje al Unicaja de Málaga, campeón de la Copa del Rey, y registrar la mejor entrada en años, con más de 26.000 personas (26.061 fue la cifra oficial) en sus asientos, estaba preparada para la fiesta.
La primera acción del partido fue un ataque del Racing que obligó a Yáñez a apagar el fuego. Pero hasta ahí las prestaciones de los de José Alberto en la primera mitad. Todo fue el Málaga, con poco acierto, con falta de claridad en los últimos metros, pero esta vez sí buscando de forma directa la portería contraria.
Tuvo varias Rubén Castro para adelantar a los de Pellicer, pero de momento no era el día, especialmente cuando disparó al muñeco un rebote entre dos defensas que se le quedó botando dentro del área.
Lago Junior estuvo otra vez hiperactivo desde la derecha, pero sus centros no encontraron rematador, como algunos balones que puso Fran Villalba. Pero lo intentaba el Málaga al que le faltó la llegada de sus laterales y quizás, con los espacios entre líneas, echó de menos a Aleix Febas.
Cristian, en el lateral izquierdo, fue una de las buenas noticias de la primera mitad. Cada vez más asentado en la posición ofrece algunas garantías que Javi Jiménez no ha dado en toda la temporada.
Rubén Yáñez dio el susto tirándose al suelo y llevándose la mano al abductor, pero no pasó de ahí.
Al Racing le costaba encontrar a su hombre más desequilibrante, Jorge Pombo, que trajo de cabeza a los blanquiazules en la ida.
Pero esto, amigos, es el Málaga Club de Fútbol de la temporada 2022-2023. Nada más echó a rodar la pelota en la segunda mitad, la pelota le llegó a Íñigo Vicente en la banda izquierda, cerca del centro campo. Y mil años tarde llegó Genaro con la pierna arriba. No tardó ni medio segundo Moreno Aragón en echarse la mano al bolsillo trasero del pantalón, donde los colegiados guarda el máximo castigo. El '10' del Racing le puso el drama necesario en su salto al vacío. Quizás el árbitro fue demasiado diligente en tomar una decisión que no corrigió tras escuchar al VAR. Pero el sevillano a la calle. Entregando el partido por segunda jornada consecutiva al rival. Un desastre.
No dio un paso atrás el Málaga, que siguió yendo a presionar arriba. Tuvo varias llegadas prometedoras de peligro que no se concretaron en ocasión. Y el minuto 67 llegó el mazazo. Íñigo Vicente se la dio a Roko dentro del área, que hizo de pivote de fútbol sala delante de Ramalho esperando la llegada de su compañero de nuevo, que entró como Pedro por su casa para controlar y ponerla lejos de Yáñez. El Málaga, sentenciado a Primera RFEF.
De ahí al final, poco que reprochar al Málaga, que lo intentó como pudo, sin concretar ocasiones, precipitándose en lugar de madurar alguna jugada frente a un Racing que lo dejó jugar sabiendo que tendría su momento, y tuvo alguna contra peligrosa.
En el descuento tuvo el empate Rubén Castro, pero remató trabado y se fue a la izquierda de Parera. Tuvo otra Appiah, recurso de última hora. Pero ningún recurso le vale ya al Málaga, que se queda a diez puntos de la permanencia, con el goal average perdido contra el Oviedo, que ahora marca la salvación, y también del Racing. No hay remedio.