Plan Málaga Litoral, ¿quimera o realidad? Los números avalan la gran transformación del Centro

Los alrededor de 380 millones de euros que requiere su ejecución material, la necesidad imperiosa de contar con fondos de la Unión Europea y los no menos de 3,5-4 años de construcción convierten el Plan Málaga Litoral en un proyecto gigantesco, que no escapa al escepticismo y la duda de muchos.

Tanto como para que haya una pregunta que se pone sobre la mesa en los últimos meses. ¿Es una quimera o una realidad la apuesta de Málaga por afrontar la gran transformación del Centro?

¿Es asumible construir dos estaciones soterradas en La Marina y la Explanada de la Estación; un túnel de 2,3 kilómetros para absorber más de 60.000 vehículos diarios; un aparcamiento con 650 plazas bajo el paseo marítimo Ciudad de Melilla, y generar del orden de 65.000 metros cuadrados de espacios peatonales?

Los números dicen que sí. Al menos esta es la principal conclusión de un estudio encargado meses atrás por el Consistorio con el objetivo de analizar los costes-beneficios de esta macrooperación urbanística. Una ambiciosa actuación que, de llevarse a cabo, cambiará por completo la movilidad en el eje central de la capital de la Costa del Sol.

El parámetro final del trabajo realizado por María Fernandez Pérez, economista y responsable de Etalia Consultoría Estratégica y Regulatoria, es taxativo: en un horizonte temporal de unos 33 años, los que transcurrirían entre 2024 y 2057, el desarrollo del Plan Málaga Litoral generará unos beneficios brutos de 1.004 millones de euros. Cifra que ascendería a unos 2.350 millones sin aplicar una tasa de descuento del 5% anual.

"Podemos afirmar que la sociedad estará mejor con ese plan que si no se desarrolla; los beneficios esperados justifican la inversión prevista"

María Fernandez Pérez, economista y responsable de Etalia Consultoría Estratégica y Regulatoria

"A modo de conclusión podemos afirmar que la sociedad estará mejor con ese plan que si no se desarrolla; los beneficios esperados justifican la inversión prevista y se logra una rentabilidad del 16,8%; es una barbaridad", ha afirmado Fernández en el transcurso de una jornada celebrada este lunes en la Cámara de Comercio.

El cónclave ha permitido a los responsables municipales dar a conocer a los empresarios los detalles principales del proyecto del eje litoral, así como el contenido del estudio económico realizado. Precisamente, en este foro, el coordinador general de Infraestructuras y Proyectos, Pablo Otaola, ha perfila el esquema temporal que se maneja en la Casona del Parque para materializar esta intervención.

Tras completar los anteproyectos de las diferentes piezas del puzzle del plan a lo largo de este casi extinto mandato, la idea es disponer de los proyectos y de la licitación de las obras en un máximo de dos años.

Y a partir de ahí, unos tres años y medio de trabajo físico. "Siempre veo sonrisas cuando digo eso, pero hay un ejemplo que demuestra que se puede: la operación Madrid Río, que con 50 kilómetros de túnel se hizo en ese tiempo; se puede y hay que hacerlo", ha remarcado.

Con estos parámetros, el esquema del Plan Málaga Litoral es que se ejecute en el intervalo de 2024-2029. Aunque la ratificación de este horizonte sólo es posible si se cuenta con la financiación necesaria, algo en lo que es irrenunciable disponer de fondos europeos.

Beneficios mayúsculos

A la espera de alcanzar ese punto de la ecuación, lo que es evidente es que los análisis objetivos justifican y avalan la apuesta del alcalde, Francisco de la Torre. Los poco más de 1.000 millones de euros de beneficios brutos estimados en este largo periodo de tiempo (613 millones netos) es el resultante de la suma de los "ahorros" de tiempo y combustible, por ejemplo, que la materialización del túnel y de las estaciones soterradas generarán en la población.

De todos los elementos tomados en consideración, el de mayor impacto es el del ahorro de tiempo que se logrará una vez ejecutado el soterramiento del tráfico en Muelle Heredia y Paseo de los Curas. El mismo se cifra, en todo el periodo analizado, en unos 463 millones de euros.

Según el estudio, en el escenario actual, sin Plan Málaga Litoral, el coste de tiempo es de unos 48 millones de euros anuales, cifra que se incrementará hasta los 58 millones cuando entre en funcionamiento la anunciada Zona de Bajas Emisiones (ZBE), ya que del orden de 30.000 vehículos tendrán que buscar itinerarios alternativos al no poder pasar por el centro de la ciudad. Con la transformación pretendida del eje litoral estos costes bajarán a unos 22 millones anuales.

Asimismo, se habla de ahorros de 261 millones de euros por el impacto positivo de aumentar las zonas verdes y los espacios peatonales; de otros 157 millones por los costes que se evitarán por los accidentes de tráfico, y unos 33,4 millones por una menor incidencia del ruido.

Desglose de la inversión

Los 391 millones de euros (incluyendo gastos de mantenimiento) en los que se valora el proyecto del eje litoral, del orden de 190 millones de euros se asignan de manera directa al túnel de 2,3 kilómetros proyectado bajo Muelle Heredia, Paseo de los Curas y el Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso. Una infraestructura capaz de absorber más de 60.000 vehículos diarios.

Una de las decisiones que habrá de adoptar el Consistorio es si finalmente se opta por un paso soterrado en un doble nivel o uno en el mismo nivel, lo que reduciría la complejidad de la obra y su coste. En el esquema actual se maneja la idea de que una parte del eje soterrado, entre el paseo Picasso y Torrijos cuente con dos carriles por sentido, uno de ellos Bus-VAO, mientras que entre Torrijos y el Guadalmedina sean tres carriles por sentido (uno Bus-VAO).

La ejecución del túnel es indispensable para programar la estación subterránea de la Plaza de la Marina (55 millones de euros) y, por ende, de toda la operación de referencia urbana de la superficie ganada, con unos 65.000 metros cuadrados. Hay que recordar que el proyecto ganador del concurso internacional de ideas para peatonalizar este entorno apuesta por ampliar el Parque en dirección al Palmeral de las Sorpresas.

En este escenario, la primera de las piezas que podría empezar a acometerse, al tener, además, el apoyo económico de la Junta de Andalucía, es el intercambiador de la Explanada de la Estación, tasado en unos 70 millones de euros. El objetivo apuntado por Otaola es que pueda ser una realidad coincidiendo con la Exposición Internacional que Málaga aspira a organizar en 2027.

Para rebajar el coste económico de la operación se maneja la venta de la parcela de la actual estación de autobuses en el Paseo de los Tilos, por la que se podrían obtener unos 40 millones de euros. Sobre el terreno se ha manejado la idea de dos torres de oficinas y hotel.