Así se verá el Cortijo Jurado de Málaga tras borrar el edificio futurista del nuevo complejo de oficinas
El Ayuntamiento de Málaga justifica los ajustes realizados en la necesidad de convertir el antiguo cortijo, del siglo XIX, en "referente singular del paisaje de la zona".
25 septiembre, 2023 05:00Noticias relacionadas
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Las exigencias emitidas por los técnicos de la Gerencia de Urbanismo modifican de manera más que notable la arriesgada propuesta realizada por el arquitecto Ángel Asenjo para acometer la transformación del histórico Cortijo Jurado en un gran complejo de oficinas. Las visuales de la ordenación final, acomodada a las demandas municipales, contrastan sobremanera con la idea inicial de Asenjo, que dibujaba un rompedor edificio en la frontal del inmueble original.
Frente a las pretensiones del urbanista, el Ayuntamiento limita hasta el extremo cualquier construcción que ensombrezca la visual de Cortijo Jurado desde el entorno más inmediato. El peso de la consideración llega hasta el punto de prohibir cualquier cuerpo de nueva ejecución sobre la rasante de la plataforma sobre la que se levante el cortijo.
"Se define el área edificable de la parcela excluyendo la posibilidad de construir en las zonas más visibles desde las vías rodadas", se indica en el avance del estudio de ordenación del proyecto, en el que se delimitan dos áreas de movimiento.
Una de ellas sí estará sobre rasante, pero delimitada de manera que "se permitan las principales vistas del edificio, dejando libre de edificación la zona delantera del mismo, correspondiente a la zona Sur-Sureste de la parcela, respetando las distancias a linderos públicos, así como las servidumbres de carreteras y evitando la zona inundable del río Campanillas".
La otra estará bajo rasante, ocupando parte del subsuelo de la edificación de nueva planta que se desarrolle y de la zona verde privada, para destinarla a aparcamientos. Con ello se garantiza la dotación de 1 plaza por cada 50 metros cuadrados, y a otros usos complementarios. En cuanto a las alturas de la edificación, se plantea un máximo de planta baja más 2 alturas, de manera que, "en ningún caso, la cota de cubierta debe superar la cota de la plataforma del edificio protegido (+35,00 m)".
Asimismo, se evita adosar la nueva edificación al edificio protegido en todo su perímetro, planteando un patio interior que puede ser atravesado para permitir las conexiones entre edificios y donde estarán ubicados los núcleos de comunicación vertical de acceso a los mismos.
Los condicionamientos planteados por los técnicos de Urbanismo, finalmente, asumidos por la promotora privada SUBA en su propuesta final, otorga el protagonismo casi absoluto de la operación al Cortijo Jurado. Y muestra de ello es la insistencia en que cualquier actuación sobre la parcela respete su visión, "como referente singular del paisaje de la zona".
25 millones de inversión
La protección arquitectónica que pesa sobre la edificación, que data del siglo XIX, es de grado 1. Es por este motivo por el que se insiste en que la cubierta de las nuevas edificaciones "no podrá sobrepasar la rasante de la plataforma en que se ubica el edificio protegido".
Aunque los ajustes inciden en el diseño de SUBA, no altera las condiciones urbanísticas previstas. En este sentido, se mantiene la pretensión de dar forma a unos 19.000 metros cuadrados de oficinas, así como de unos 26.000 metros cuadrados de espacios abiertos.
De acuerdo con los datos dados a conocer por la promotora, la inversión final puede rondar los 25 millones de euros. La intervención busca crear "espacios inteligentes y multifuncionales" en una zona estratégica de la capital, en las proximidades del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) y de la Universidad. A esto hay que sumar la decisión de recuperar el histórico edificio como sede social de Sinerba.
El proyecto prevé generar distintos formatos de espacios que se adapten al modelo laboral de cada empresa. En la elaboración de la propuesta se ha contado con la colaboración de firmas especializadas para optimizar el diseño y materiales del edificio, con el objetivo de reducir su consumo energético, además de buscar alternativas ecológicas y económicas a los sistemas constructivos.