El parricida de Campanillas se saltó la orden de alejamiento de su padre y lo mató al salir del calabozo
Paco, de 81 años, acompañó a su hijo a renovarse el DNI y allí este fue detenido por el quebrantamiento de la medida legal. Al día siguiente, entró a su casa rogándole una ducha.
13 septiembre, 2024 15:36Noticias relacionadas
El Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga, en funciones de juzgado de guardia, ha acordado este viernes el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del hombre de 41 años detenido por matar presuntamente a su padre , de 81, a puñaladas en la zona de Campanillas, en la ciudad de Málaga. Está investigado por un delito de asesinato, pero también por otro de quebrantamiento de una orden de alejamiento.
Así lo ha confirmado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Precisamente el mismo juzgado que este viernes ha decretado su ingreso en prisión, fue el que en 2022 había dictado una orden de alejamiento respecto de su padre.
Un día antes del asesinato, el pasado martes, el presunto homicida --que parece que tiene problemas mentales, según fuentes policiales-- pidió a su padre que le acompañara a renovar el DNI a la comisaría. Allí, acabó siendo detenido al constatarse la existencia de la orden de alejamiento.
El día de los hechos, después de haber pasado la noche en el calabozo por el quebrantamiento de esta medida judicial, el detenido acudió nuevamente a la casa de su padre para pedirle que le permitiera ducharse, a lo que Paco, así se llama el fallecido, accedió. Una vez dentro, su hijo se dirigió a la cocina, donde cogió un cuchillo para acabar con la vida de su padre a puñaladas.
Un vecino de la zona estaba aparcando su coche frente a la casa de Paco y escuchó sus gritos de auxilio, por lo que no dudó en correr hacia el interior de la vivienda sin saber muy bien qué iba a encontrarse dentro. La escena era dantesca.
Como pudo, según ha relatado su mujer al programa Vamos a Ver de Telecinco, cogió una toalla para intentar hacerle un torniquete y mientras llegaba la ambulancia trató de animarle a que siguiera consciente. "¡Paco, vas a salir de esta!", le decía el hombre, con tal de hacerle pasar el rato de espera de una forma más llevadera.
El otro hijo de Paco también estaba en la casa, fue él quien llamó nervioso al 112. Su hermano le hirió en el brazo. Fue él mismo quien explicó a este vecino generoso de Campanillas que su hermano había huido a la carrera y que llevaba el arma consigo. Finalmente, fue detenido en las inmediaciones de la vivienda por una patrulla de la Policía Local y desde este viernes está en la cárcel.
Paco salió de su casa con vida, pero finalmente no sobrevivió la gravedad de sus heridas y acabó muriendo en el Hospital Universitario Virgen de la Victoria a las dos de la madrugada. Todos le recuerdan como un buen hombre, que se desvivía por los suyos. Perdió a su mujer hace unos años y desde que se jubiló del sector de la construcción, decidió centrarse en el campo, su gran pasión, para cuidar de sus animales y de su huerto. Algunas personas del barrio incluso le compraban piezas de fruta de sus cultivos, lo que le hacía muy feliz.