Comienza la producción de la nueva generación del Hyundai i30
El i30 es uno de los modelos más importantes, al menos en Europa, para el gigante coreano Hyundai. La primera generación se lanzó al mercado en 2008, y desde entonces el compacto asiático no ha hecho más que completar hojas y hojas de su historia de éxito, compitiendo con grandes resultados en uno de los segmentos más difíciles del mercado europeo.
La tercera generación del i30 se ha presentado hace pocos meses, con un diseño más atractivo y maduro, en el que la calidad se ha potenciado con detalles cromados y líneas más estudiadas. En el interior se ha hecho especial hincapié en la tecnología y en la conectividad, con una gran pantalla desde la que se controlan la mayoría de sistemas del vehículo.
Tras su presentación oficial en el pasado salón de París, el i30 ha iniciado de nuevo su producción en la planta que Hyundai posee en Nosovice, República Checa, construida en 2007 precisamente para el inicio de la producción del i30. En la factoría checa Hyundai produce también el Tucson y el ix20.
Con más de 800.000 unidades fabricadas entre las dos generaciones anteriores, el nuevo i30 se presenta con las credenciales que otorga un modelo ya perfectamente asentado en el mercado, con un reconocimiento por parte de la clientela, que ven al i30 como una apuesta segura.
La nueva edición de este modelo llegará en los próximos meses a los concesionarios con tres motores de gasolina y otros tres propulsores diésel, haciendo del nuevo 1.4 Turbo de 140 CV la punta de lanza de una ofensiva en la que encontramos elementos que hasta hace muy poco eran imposibles de ver en marcas coreanas como el cambio de doble embrague.
La apuesta de Hyundai por el mercado europeo es más que evidente, dejando como prueba la presencia no sólo de la factoría en República Checa, sino también, por ejemplo, la planta de su marca KIA en Eslovaquia, que hace unos días ha celebrado el décimo aniversario de su inicio de producción.