Cristina Fernández de Kirchner arenga a sus simpatizantes tras los violentos enfrentamientos frente a su casa

Cristina Fernández de Kirchner arenga a sus simpatizantes tras los violentos enfrentamientos frente a su casa Prensa Cristina Fernández De Kirchner EFE

Mundo

Cristina Kirchner arenga a los peronistas que se enfrentaron a la Policía con violencia ante su casa

La vicepresidenta argentina acusa a la oposición de competir para ver "quién pega más a los peronistas" y censura la actuación policial contra sus afines

28 agosto, 2022 09:03

Las movilizaciones convocadas a las puertas de la casa de Cristina Fernández de Kirchner tras su imputación por corrupción han terminado con graves enfrentamientos. Los seguidores de la expresidenta argentina y la Policía de Buenos Aires han protagonizado choques violentos después de que los primeros rompieran el perímetro policial. Unos hechos tras los que la actual vicepresidenta del Gobierno de Alberto Fernández ha arengado a sus simpatizantes peronistas, censurando así la actuación policial. 

La protesta convocada este sábado frente al domicilio de Kirchner, después de que el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires instalara un conjunto de vallas en torno a su vivienda, ha acabado en esos violentos disturbios entre los agentes policiales y un grupo de manifestantes afines a la líder política. Unos incidentes que se producen días después de que un fiscal haya reclamado para la expresidenta 12 años de cárcel por un supuesto desvío de fondos.

Los altercados comenzaron minutos antes de las 18:00 hora local (23:00h en España). La protesta transcurrió de forma pacífica en un principio. Todo cambió cuando un grupo de simpatizantes de Cristina Fernández consiguió tirar abajo las vallas, rompiendo así el perímetro policial y avanzando hacia el domicilio de la exmandataria.

Choques violentos entre los simpatizantes de Cristina Kirchner y la Policía de Buenos Aires

Choques violentos entre los simpatizantes de Cristina Kirchner y la Policía de Buenos Aires Juan Ignacio Roncoroni EFE

Fue entonces cuando los agentes antidisturbios cargaron posteriormente contra los manifestantes, utilizando un camión de agua para dispersar a la multitud. Esta respondió con forcejeos y ataques a los vehículos policiales. Según fuentes del Ministerio de Seguridad capitalino consultadas por Efe, hubo un total de 14 policías heridos, en tanto que entre los manifestantes no hubo heridos ni detenidos.

Tras lo ocurrido y la tensión generada, Kirchner salió a pronunciar un discurso en el que mostró su respaldo a sus afines. Incluso a pesar de la violencia que protagonizaron en esos choques contra las patrullas policiales.

Choques violentos entre los simpatizantes de Cristina Kirchner y la Policía de Buenos Aires

Choques violentos entre los simpatizantes de Cristina Kirchner y la Policía de Buenos Aires Juan Ignacio Roncoroni EFE

Entre gritos de "Cristina presidenta", Fernández de Kirchner pronunció un discurso nocturno en el que pidió la retirada y el abandono de la protesta por parte de sus seguidores. Pero en el que acusó a la oposición de competir para ver "quién le pega más a los peronistas", en referencia a las cargas policiales. Sus críticas se centraron especialmente en el alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta. El motivo es que su gobierno municipal ordenó la instalación de estas vallas en la madrugada del sábado. 

"Tenemos que pedirle a la oposición, sobre todo ahora que se avecina una nueva campaña presidencial, que dejen de competir entre sí para ver quién odia más y quién le pega más a los peronistas. Esas competencias para ver quién es más duro nunca llegaron a buen puerto en la Argentina", reiteró sobre un escenario improvisado a las puertas de su domicilio.

Un simpatizante de Cristina Kirchner, frente a la Policía de Buenos Aires antes de las cargas policiales

Un simpatizante de Cristina Kirchner, frente a la Policía de Buenos Aires antes de las cargas policiales Juan Ignacio Roncoroni EFE

Respaldo peronista

Las movilizaciones en favor de la expresidenta comenzaron el pasado lunes, cuando un fiscal federal solicitó para ella una condena a doce años de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por presuntos delitos de corrupción. Desde ese mismo día, un grupo de militantes políticos, sociales y estudiantiles afines a la exmandataria mantenía una vigilia en torno a su vivienda. Su objetivo era expresar apoyo y evitar congregaciones de sus detractores en el lugar.

La tensión comenzó cuando el Gobierno porteño aprovechó las fuertes lluvias de la madrugada de este sábado para limpiar la zona, reforzar la presencia policial y establecer el polémico vallado. Así, podía impedir la confluencia de nuevos manifestantes.

La vicepresidenta había emitido un comunicado en las primeras horas de la tarde para expresar su rechazo a esta decisión. En el que subrayó que amaneció con la esquina de su casa "literalmente sitiada".

"Las vallas colocadas por el señor Larreta son algo más que impedir la libre circulación. Son algo más que sitiar a la vicepresidenta de la nación. Quieren prohibir las manifestantes de amor y de apoyo absolutamente pacíficas y alegres, que tienen lugar ante la ya inocultable persecución del partido judicial", sostuvo en el texto.

[La Fiscalía argentina pide 12 años de prisión para la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner]

En una rueda de prensa nocturna, Horacio Rodríguez Larreta explicó que estas medidas pretendían favorecer la "paz social" y el "orden público". Así, según señaló, podrían convivir "el derecho a manifestarse con el derecho a circular".

"Lo que inicialmente era una expresión de apoyo, se convirtió en un acampe permanente, con grupos que se iban turnando para ocupar el espacio público. Una cosa es una manifestación y otra muy distinta es un plan sistemático de ocupación del espacio público. Eso no lo podemos permitir", aseguró el alcalde capitalino.

Gran movilización

La decisión de colocar las vallas llevó a que la coalición oficialista del Frente de Todos llamó a una concentración masiva frente a la vivienda de la vicepresidenta. Ministros, funcionarios de alta jerarquía y dirigentes políticos y sindicales encabezaron una movilización de miles de personas que clamaban por la retirada del vallado. Una gran manifestación que ha acabado con esa violencia antes relatada.

Tras lo ocurrido, el presidente argentino, Alberto Fernández, ha señalado en su cuenta de Twitter su "más enérgico repudio" ante unos hechos que catalogó como "violencia institucional". Es decir, achacando lo ocurrido a las autoridades porteñas y a la Policía. Por eso ha pedido a los líderes de la oposición que "cesen las expresiones provocativas y violentas". La respuesta del alcalde de Buenos Aires ha sido señalar que tanto el presidente como la vicepresidenta "no hacen más que echar nafta (gasolina) al fuego".

[Iglesias visita a Kirchner tras ser imputada por corrupción y le regala su libro de "medios y cloacas"]

El peronismo, que hasta hace unas semanas atravesaba fuertes divisiones internas, está en un "permanente estado de alerta y movilización" tras la solicitud de condena contra Cristina Fernández. Todo después de que el fiscal federal Diego Luciani, en el marco de un juicio por presuntas irregularidades en la adjudicación de obras públicas cuando Kirchner era jefa de Estado, haya reclamado una pena muy dura para la expresidenta.

Luciani considera que está probado que Cristina Fernández fue la "jefa" de una asociación ilícita que causó un millonario perjuicio económico al Estado. La ahora vicepresidenta sostiene que no existen pruebas en su contra y que es víctima de una "persecución política y mediática".