El primer ministro francés, Manuel Valls, ha reconocido que la líder del ultraconservador y eurófobo Frente Nacional, Marine Le Pen, podría ganar las elecciones presidenciales del próximo año en Francia. "Es posible", ha admitido según declaraciones recogidas por la Agencia France Presse, mientras la líder de la ultraderecha francesa muestra músculo en las encuestas y se ha crecido tras la victoria de Donald Trump.

Valls ha hecho las declaraciones durante su visita a Berlín, el mismo día que llega Barack Obama a la capital alemana y a 24 horas de la mini cumbre internacional que reunirá a ambos junto a Angela Merkel, la británica Theresa May y el italiano Matteo Renzi. En un evento del diario germano Süddeutsche Zeitung, recogido Reuters, Valls ha asegurado que Europa está en peligro de romperse y que Francia debe continuar sus reformas, incluido bajar los impuestos de sociedades.

Un sondeo en Le Monde en septiembre le concedió a Le Pen entre el 26% y el 30% en intención de voto para la primera vuelta de las presidenciales en 2017, aunque en la segunda ronda perdería, según los datos del diario francés. Sí, parece afianzada su paso a esa segunda vuelta en cualquier caso, señala L'Internaute en su repaso a todos los sondeos.

Primarias socialistas sin aclarar

Las primarias socialistas se celebrarán a finales de enero, y con François Hollande con su popularidad cada vez más tocada, aún no se sabe quiénes serán los candidatos en esa carrera. El presidente francés se comprometió a anunciar su decisión en diciembre y mientras tanto los sondeos ya se adelantan a hacer quinielas.

El ministro de Economía Arnaud Montebourg tendría buenas posibilidades de ganar las primarias socialistas, aunque Hollande ganaría por los pelos al que ocupara esa cartera hasta su dimisión en agosto, Emmanuel Macron. Si Macron participara en las primarias socialistas, perdería ante una posible candidatura alternativa de Manuel Valls por un 16% de diferencia.

Macron anunció el miércoles su candidatura a la presidencia y evitó aclarar si lo hará a través de las primarias socialistas o como candidato independiente. Quien se define a sí mismo como "ni de izquierdas ni de derechas" y ha afirmado no ser socialista, propone una "revolución democrática" contra el "statu quo" del sistema que a su parecer mantiene a Francia bloqueada desde hace tres décadas.

Macron ha reconocido sentirse identificado en la lucha contra el establishment del recientemente elegido nuevo presidente de EEUU, Donald Trump. Así, parece que su propuesta -aún embrionaria, pero que sí es europeísta, liberal y más moderada que la de Le Pen- podría equilibrar la balanza en la pugna antisistema por el Elíseo.

El equipo del Frente Nacional ya se ha puesto en contacto con el equipo de Trump para trabajar conjuntamente y considera que sienta precedente para conseguir lo que antes se creía imposible, como apuntó en una entrevista con la BBC.

Mientras, el centro-derecha celebra la primera vuelta de sus primarias este domingo, con el ex primer ministro Alain Juppé y el expresidente Nicolas Sarkozy como favoritos.

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