Londres acusa a la UE de "socavar su soberanía en Gibraltar" y no respetar "el pacto con España"
El mandato negociador de Bruselas dice que Madrid realizará los controles en el puerto y el aeropuerto del Peñón.
21 julio, 2021 01:17Noticias relacionadas
La tensión post-Brexit entre Reino Unido y la Unión Europea vuelve a dispararse, esta vez a cuenta de Gibraltar. El Gobierno de Boris Johnson ha acusado a la Comisión de Ursula von der Leyen de socavar su soberanía sobre el Peñón en beneficio de España. El nuevo conflicto tiene su origen en el mandato que Bruselas acaba de aprobar para negociar con Londres el derribo de La Verja en Gibraltar. Un mandato que deja en manos de España (y no de Frontex, como pactaron Madrid y Londres la pasada Nochevieja) los controles fronterizos en el puerto y el aeropuerto de La Roca.
"Reino Unido, Gibraltar y España pactaron cuidadosamente un Acuerdo Marco pragmático, consultado plenamente con la Comisión. El mandato publicado por la Comisión entra en conflicto directo con ese marco. Pretende socavar la soberanía de Reino Unido sobre Gibraltar y no puede constituir una base para las negociaciones", ha dicho el ministro de Exteriores británico, Dominic Raab, en un duro comunicado.
"Hemos demostrado constantemente pragmatismo y flexibilidad en la búsqueda de acuerdos que funcionen para todas las partes, y nos decepciona que esto no haya sido correspondido. Instamos a la UE a que se lo piense de nuevo”, reclama Raab.
Por su parte, el Gobierno de Gibraltar ha denunciado también que el mandato de Bruselas "se aleja inútilmente en muchos aspectos del Acuerdo Marco pactado por Reino Unido y Gibraltar con España el 31 de diciembre del año pasado". "No hay ninguna posibilidad de que el actual borrador constituya la base de un acuerdo", asegura el ministro principal, Fabián Picardo, en un comunicado.
El Gobierno del Peñón asegura estar preparado para un escenario en el que las negociaciones fracasen y Gibraltar se quede sin ningún tipo de relación comercial con la UE en el futuro. "Trabajaremos estrechamente con Reino Unido, en particular con el ministro de Exteriores Dominic Raab, para buscar la mejor solución posible para Gibraltar", ha concluido Picardo.
En contraste con la indignación en Londres, el Gobierno de Pedro Sánchez ha acogido positivamente la propuesta del Ejecutivo comunitario. "España agradece y valora positivamente el esfuerzo desarrollado por la Comisión Europea al aprobar una propuesta de mandato adaptado al entendimiento entre España y Reino Unido", ha dicho el ministerio de Exteriores en un comunicado.
Gibraltar no está incluido en el ámbito de aplicación del Acuerdo de Comercio y Cooperación que firmaron la UE y Reino Unido a finales de 2020, y que define las relaciones entre los dos excónyuges tras el divorcio. Bruselas se comprometió a negociar un pacto separado sobre Gibraltar sólo si España lo solicitaba, como así fue tras la entente entre Madrid y Londres en Nochevieja. El
El objetivo del mandato aprobado por Bruselas este martes es eliminar los controles de personas y mercancías en la frontera terrestre entre España y Gibraltar y garantizar a la vez la integridad del espacio Schengen y del mercado único.
Para garantizar la plena protección del espacio Schengen, "el control y la vigilancia de las fronteras exteriores se realizarían en el puerto, el aeropuerto y las aguas de Gibraltar y correrían a cargo de España, en aplicación de las normas vigentes de la UE", sostiene el mandato de negociación.
"Los guardias de fronteras españoles tendrían todas las competencias necesarias para llevar a cabo los controles y la vigilancia de las fronteras y cumplir con las obligaciones consiguientes, como las actuaciones promovidas por las descripciones en las bases de datos (por ejemplo, denegaciones de entrada)", prosigue el texto.
La presencia de la policía española en el Peñón es precisamente lo que ha provocado el choque entre Bruselas y Londres. "Nosotros en diciembre fuimos bastante claros en que no podíamos aceptar que España realizara ningún control en Gibraltar por la cuestión de la soberanía de Gibraltar y su lugar en Reino Unido. Pero las dos partes acordamos que Frontex sí podría realizar controles en Gibraltar. Ahora, el mandato de la Comisión dice que España realizará esos controles, lo que crea muchas dificultades", explican a EL ESPAÑOL fuentes británicas.
El Gobierno de Boris Johnson tuvo acceso al primer borrador del mandato y presionó hasta el final al Ejecutivo comunitario para que modificara este punto. Pero la Comisión se ha mantenido firme y ha designado a España como responsable de los controles. Eso sí, el Ejecutivo comunitario toma nota de la intención del Gobierno de Pedro Sánchez de pedir la ayuda de Frontex durante un periodo transitorio de cuatro años, aunque eso no figura en el texto legal.
"Ya hemos admitido que Madrid pretende solicitar la asistencia de Frontex para cumplir sus obligaciones en lo que se refiere al control de las fronteras exteriores", ha dicho el vicepresidente de la Comisión y responsable de las relaciones con Londres, el eslovaco Maros Sefcovic.
¿Qué va a ocurrir ahora? El mandato todavía debe ser ratificado por los Gobiernos de los 27 y podría modificarse por el camino. España tiene para ello poder de veto reconocido por sus socios comunitarios. El secretario de Estado para la UE, Juan González-Barba, ha dicho que esperaba un acuerdo definitivo con Londres para finales de año. Pero si ninguno de los dos bandos rectifica, el resultado final podría ser una frontera dura entre el Peñón y España, que perjudicaría especialmente a los 15.000 trabajadores españoles que cruzan cada día la Verja para trabajar en Gibraltar.