Adolescentes, gripe y aspirina: El síndrome de Reye
Noticias relacionadas
Si habéis seguido todos mis artículos sobre la cantidad de curiosidades y funciones que puede tener la Aspirina, tenéis permiso para llamarme pesado, o al menos pensar que es un fármaco que da mucho de si (algún día os hablaré de otros que si son auténticos polifuncionales, tiempo al tiempo).
En este caso, os contaré una curiosidad donde, más que la Aspirina, tiene su importancia la gripe y a quien afecta. Como ya os conté también en Medciencia hace tiempo, la gripe es un tipo de infección estacional, que suele afectar en otoño – invierno, y para la cual hay que preparar una vacuna diferente anualmente gracias a su elevada tasa de mutación (como el virus cambia, se necesita una nueva vacuna continuamente).
Para empezar, deberíamos preguntarnos ¿qué es el Síndrome de Reye? Pues es un daño cerebral, de tipo agudo, junto a un daño hepático (se alteran las funciones del hígado), de causa desconocida. Se ha asociado a la situación de adolescentes entre 10 y 14 años que han sido tratados con Aspirina (o Ácido Acetil Salicílico) de forma rutinaria.
Este síndrome aparece de forma repentina y suele darse después de algún tipo de infección de vías respiratorias altas (nasofaringe, laringe, traquea…). Entre sus síntomas podemos destacar su comienzo con vómito de varias horas, seguido rápidamente por un comportamiento irascicle y agresivo. Poco a poco va empeorando el cuadro y el niño o adolescente es incapaz de estarse quiero o alerta.
También podemos nombrar otros síntomas como la confusión, el letargo, la pérdida de conocimiento (o incluso llegar al coma), cambios del estado mental, crisis epilépticas o posturas raras de brazos y piernas (la llamada “postura de descerebración” con los brazos extendidos y rectos, girados hacia dentro, y las piernas estiradas con las puntas de los dedos hacia abajo).
La parte más importante para diagnosticar esta enfermedad, como siempre, es la clínica (los signos y síntomas que el médico puede ver o el paciente le puede contar). Pero, también se pueden usar otras pruebas como un análisis de sangre, TAC, biopsia de hígado (coger una muestra de tejido), pruebas de la función hepática, examen de amoníaco sérico o una punción lumbar.
No existe un tratamiento específico, pero el médico se centrara en vigilar que la presión intracraneal no se desate, aparte de vigilar la gasometría arterial o el equilibrio acido-base de la sangre. Por otro lado se pueden usar tratamientos como el soporte respiratorio (cuando el paciente necesita respirar en un coma), líquido endovenoso o esteroides (estos últimos ayudan a disminuir la inflamación).
Como veis, una gripe puede dar más de si de lo que parece, sobre todo en determinadas circunstancias como esta. Aunque, por otro lado, cabe destacar que en los últimos años ya no hay muchos casos porque ha dejado de recomendarse el tratamiento con Aspirina para los niños o adolescentes, como forma de evitar el riesgo a un síndrome de Reye en la época gripal.
Vía: MedlinePlus.
Imagen: Entrepadres, Medicontacto.