Los dinosaurios tenían su propia droga alucinógena
Un fósil de planta herbácea ha traído un descubrimiento interesante: un hongo que podría haber sido una droga alucinógena en la era de los dinosaurios.
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Los seres humanos no somos los únicos animales que han descubierto cómo drogarse; la naturaleza está llena de animales que alguna vez han tomado alguna droga alucinógena, incluso los dinosaurios en su momento.
Mucha gente se sorprendió cuando en Omicrono contamos la historia de unos delfines que se drogan usando peces globo, pero no son los únicos. Un reciente descubrimiento revela que los ingredientes para las drogas que más se toman en la actualidad ya existían hace millones de años. El descubrimiento parte de otro muy importante: el fósil de planta herbácea más antiguo que se conoce, conservado en ámbar.
Gracias a la recubierta de ámbar los científicos han podido estudiar al detalle este ejemplar de hierba; las plantas herbáceas se caracterizan por no tener órganos leñosos, y por eso es difícil de encontrar como fósil.
Sólo por eso este ejemplar de entre 97 y 110 millones de años de antigüedad ya será digno de mención, pero además los científicos encontraron a un “polizonte” encima: un hongo ya extinto, Palaeoclaviceps parasiticus.
Un hongo que hace las veces de droga alucinógena
Este hongo es un pariente cercano del cornezuelo, también conocido como ergot y usado para crear LSD. En muchos casos este hongo provoca alucinaciones cuando se ingieren granos de trigo o maíz contaminados; de hecho se cree que el ergot tuvo un papel importante en la era de la caza de brujas en la Edad Media, ya que provocaba visiones que llevaban a acusaciones que acababan con la muerte de una inocente.
El Palaeoclaviceps parasiticus podría haber provocado el mismo efecto en los animales dominantes de la era, los dinosaurios; los científicos del estudio afirman que hay pocas dudas de que los saurópodos comieron este tipo de plantas herbáceas, pero no es seguro el efecto que tenía el hongo sobre su cerebro. Cabe preguntarse qué tipo de fiestas alocadas montaron los dinosaurios en su mejor momento.