Después de que Moncloa haya deslizado su proyecto España 2050 en el que un centenar de expertos tienen encomendada la delineación de la economía y de la sociedad de futuro, Nadia Calviño ha salido al paso para marcar territorio.
Tal y como hoy desvela EL ESPAÑOL, la vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos ultima la puesta en marcha de un equipo reducido de economistas con los que diseñará la reconstrucción tras la crisis derivada del coronavirus. Este equipo, además, no será superior a veinte efectivos.
Eficacia o propaganda
El buscar soluciones aquí y ahora es el leitmotiv de este comité asesor de Calviño, algo muy diferente a la labor que teóricamente han de desarrollar los 100 sabios de Moncloa -no sólo economistas, también sociólogos y científicos- que han de rendir cuentas a Sánchez.
La existencia de dos equipos en el Gobierno y con objetivos concomitantes resulta una redundancia a primera vista. Salvo que en el Ejecutivo quieran explotar tanto la eficacia -ahí encajaría la composición y el plazo temporal que asume el equipo de Calviño- como la propaganda.
Recetas de Europa
El puñetazo en la mesa de Calviño se produce en un momento en el que suena su nombre para presidir el Eurogrupo, entre los recelos de los ministros de Pablo Iglesias, que abogan abiertamente por otras recetas económicas.
Hay tiempo para pensar la sociedad que queremos construir dentro de tres décadas. Pero cuando las autoridades monetarias alertan de que el más mínimo rebrote del virus puede destruir irremediablemente nuestra economía, hay que aferrarse a quienes piensan en lo acuciante. Así lo hace Calviño.