Las contradicciones de Lula, según los periódicos

Ayer visitó España el presidente de Brasil, Ignacio Lula da Silva, que habla de sí mismo como si fuera una paloma de la paz. En todas las portadas, una fotografía del hombre que derrotó a Bolsonaro y recuperó el mando en su país. Empiezo por la de El País porque recoge la única entrevista que ha dado Lula a un medio español. Titular: “Sólo los que están fuera de la guerra pueden pararla”.

En la conversación que mantiene con la directora del periódico, Pepa Bueno, quedan de manifiesto las contradicciones de Lula. El líder brasileño, por ejemplo, rechaza la invasión de Rusia, pero también el envío de armas a Ucrania. Rechaza la invasión rusa, pero evita reconocer, por ejemplo, que Crimea es Ucrania.

Lula reitera que Europa “debe jugar un rol más intermedio, debe mediar”. Pepa Bueno repregunta en varias ocasiones: “Entonces, ¿qué hacen las naciones europeas? ¿Quedarse mirando mientras Rusia bombardea?”. Y él contesta, entre otras cosas, que Brasil no manda armas porque eso le permite “mediar”.

El presidente de Brasil, queda claro, hará de la guerra uno de los puntales de su proyecto e intentará, al lado de China, alzarse a ojos del mundo como el mediador que frenó la batalla. Sabéis que Yolanda Díaz admira mucho a Lula. Probablemente porque sea el único político del planeta, junto a Pedro Sánchez, que alcance niveles estratosféricos en el autoelogio. Dice Lula: “Nadie habla de paz, sólo yo”.

Sánchez, al lado de Lula, reafirmó el compromiso de España en el envío de armas y también el reconocimiento de la integridad territorial de Ucrania. La Razón cuenta en su portada que el rey hizo lo mismo: “Felipe VI defiende ante Lula la integridad territorial de Ucrania”.

En EL ESPAÑOL y en ABC podemos encontrar las consecuencias de la otra noticia internacional importante que se produjo ayer. La conversación telefónica de una hora –primera desde que empezó la guerra– entre Xi Jinping y Zelenski culminó con el envío de China a Ucrania de una especie de embajador en busca de la paz.

ALSINA–En El Mundo también es portada esta mañana una entrevista internacional.

Habla desde el exilio de Miami Juan Guaidó, que fue lo que se llamó “presidente encargado” de Venezuela. Digo “fue” porque él mismo, todavía en activo y en la oposición, reconoce que no podrá ser candidato desde los Estados Unidos.

Su testimonio genera una gran tristeza porque uno se da cuenta, al leerlo, de que apenas ha habido avances democráticos en Venezuela. “Cualquiera estaría frustrado por no haber recuperado la democracia”, dice el propio Guaidó. Además, en sus palabras se palpa que ni siquiera la oposición está consiguiendo la unidad de acción frente a Nicolás Maduro.

En España, mientras tanto, ¿qué hace la gran admiradora de Lula? El Confidencial: “Yolanda Díaz hará campaña con Podemos en Euskadi, Extremadura, Cataluña, Galicia y Navarra”. Pero el titular tiene una segunda parte: “Son territorios en los que Podemos concurre a las urnas en coalición con IU, y donde los aliados de Sumar no se postulan”.

Y atención a esta noticia de ABC: “Yolanda Díaz mantiene Sumar fuera del control del Tribunal de Cuentas. La marca política con la que acudirá a las elecciones opera como asociación y recauda dinero esquivando el régimen de transparencia que se exige a los partidos”.

Podemos, que tanto se mete con la Iglesia católica, ya funciona como una parroquia. No sólo por la moralidad que exige a sus votantes, sino por la pasta que les pide. Mientras Yolanda Díaz ruega donaciones a sus fieles, Ione Belarra suplica a los suyos que se rasquen el bolsillo para financiar la tele de Pablo Iglesias.

Seguimos, además, a vueltas con la Ley de Vivienda. El Mundo sostiene que “frena el plan antiokupas de policías y fiscales”. Pero ojo a esto que revela EL ESPAÑOL. Siendo Barcelona uno de los lugares que más sufre este problema, el PSC había hecho bandera de la antiokupación, cosa que no casaba con la Ley de Vivienda. Por eso Sánchez, en contra de Podemos, ha metido otra enmienda de manera paralela en la Ley de Eficiencia Organizativa de la Justicia. Con ella, se producirán los desalojos, siempre que el piso no sea propiedad de un gran tenedor, en un máximo de 48 horas.

Y termino con esta noticia de El Confidencial, que denota las dificultades del padre Feijóo a la hora de resucitar su partido en Cataluña y País Vasco: “El PP solo tendrá lista electoral en el 25% de los pueblos de Cataluña y el 50% de Guipúzcoa”.

*Esta es la revista de prensa que Daniel Ramírez realiza cada mañana para 'La España que madruga', en 'Más de Uno', el programa de Carlos Alsina en Onda Cero.