González Laxe avisa de la "gran profundidad de las cicatrices sociales" tras la COVID-19
El expresidente de la Xunta subraya que "es necesario reaccionar" para no quedar "descolgados" y llama a evitar el "efecto regadera" y "priorizar" las ayudas europeas
5 noviembre, 2020 15:54SANTIAGO DE COMPOSTELA, 5 Nov. (EUROPA PRESS)
El expresidente de la Xunta Fernando González Laxe, catedrático de economía aplicada de la Universidade da Coruña (UDC), ha advertido de la "gran profundidad de las cicatrices sociales" que deja la crisis de la COVID-19 entre la población gallega. "Es necesario reaccionar", ha avisado.
En su intervención en la comisión no permanente especial de estudio sobre la reactivación económica, social y cultural de Galicia por la crisis de la COVID-19, González Laxe se ha referido al desempleo, al "aumento" de la pobreza y a la "interrupción" de la educación, cuestión que le "preocupa" como docente.
En este escenario, ha pedido políticas de "atención y prestación" para los sectores más vulnerables, también "evitar la estandarización de las soluciones" y "no continuar como hasta ahora", ya que actualmente el mundo es "otro". En el contexto postpandemia, según ha incidido, hay que intentar no "quedar descolgados como perdedores".
Para ello, ha demandado "acuerdos entre todos los agentes" y el diseño de políticas y acciones "viables, factibles y útiles", con la potenciación de la industria como uno de los sectores clave.
A su juicio, es preciso "contar con una base económica que acepte y esté preparada para asumir ese cambio" y rechaza la utilización del "efecto regadera de las subvenciones". "Hay que priorizar", ha resaltado.
Precisamente en lo relativo a las ayudas que provienen de la Unión Europea, ha recomendado "trabajar en base a la empresa, que es la que genera empleo" y "a favor del país", campo en el que "entran las políticas sociales y culturales, planteadas dentro de un concepto de marca país".
Así, ha llamado a "aprovechar estos proyectos financieros europeos para adaptarse cambiando, modificando y reestructurando el modelo productivo" de Galicia.
"No vale lo que teníamos de antes porque aún tenemos ciertas deficiencias", ha concluido, en alusión al tamaño medio de las compañías gallegas, a su nivel tecnológico y de formación y al patrón de especialización en industrias "maduras".
"Dicotomía falsa"
En el turno de los grupos, la portavoz del BNG, Ana Pontón, ha avisado de que la crisis "sigue", en plena segunda ola, y en el debate "hay una dicotomía falsa" entre economía y salud. "Solo salvando la salud y frenando la pandemia vamos a ser capaces de frenar el impacto en la economía", ha subrayado.
Así, se ha mostrado preocupada por "lo que está pasando en Galicia", con "un descontrol del virus" y cifras "record" de contagios y de fallecimientos. Al respecto, ha recalcado que la "primera obligación ética y moral" del Gobierno es "salvar vidas".
Frente a esto, ha criticado al Ejecutivo que preside Alberto Núñez Feijóo, que es el que "tiene la responsabilidad de tomar medidas", que las aplica con "improvisación" y ausencia de actuaciones "más drásticas".
Asimismo, tras el nuevo cierre de la hostelería, ha censurado que "no es de recibo" que se adopte "sin ayudas directas ya" y ha urgido "como mínimo compensar el 70% de las pérdidas" del sector.
Igualmente preocupada por la evolución de la industria en los últimos años, ha reclamado el diseño de una "política industrial" para la comunidad.
Los fondos para paliar la crisis, en opinión de la líder nacionalista, son una "oportunidad", pero ha llamado la atención sobre la necesidad de que se empleen adecuadamente porque, si no, también pueden ser "un gran fracaso".
"Viraje e improvisación"
Por parte del PSdeG, su portavoz, Gonzalo Caballero, después de reivindicar la figura de González Laxe como expresidente, ha incidido en que es preciso "respaldar la salud para poder proteger la economía".
En este sentido, ha llamado la atención sobre que "corresponde a la Xunta tomar esas medidas" y ha adelantado que "va a tener el respaldo" de su grupo, pero ha comentado que en los últimos siete días "hubo un viraje" al respecto del cual pide "explicaciones".
"Hace siete días (Feijóo) se negaba a blindar Galicia, y todavía hoy no está blindada", ha alertado, en relación a la falta de confinamiento perimetral de toda la comunidad.
De este modo, ha reprochado al presidente gallego "mucha improvisación" y ha insistido en que los socialistas gallegos respaldan las medidas pero piden "un plan extraordinario de ayudas directas a los sectores afectados por el cierre".
Caballero ha trasladado su preocupación por la evolución de la demografía gallega, por la situación de la industria y por el aumento de la pobreza. Galicia, ha lamentado, es "un país que va perdiendo peso".
"Vajilla de Sargadelos"
Por parte del PPdeG, Pedro Puy, quien ha equiparado a Laxe como expresidente con una "vajilla de Sargadelos" en lugar de con un "jarrón chino", puesto que "adorna pero se usa a diario", ha coincidido en la necesidad de ser "selectivos" con las ayudas y "evaluar" sus resultados.
También le ha preguntado por el debate sobre sectores "maduros y nuevos", citando el ejemplo de la automoción, y ha calificado de "importante" avanzar en la "marca Galicia".
Empresarios y expertos
En la réplica, González Laxe ha hecho mención a la confederación de empresarios de Galicia y a su situación de interinidad, a escasos 20 días de que la patronal gallega celebre de nuevo elecciones a la presidencia.
También, ante las cuestiones de los parlamentarios, ha expuesto que en la comisión de expertos creada por la Xunta hubo una "unión de fuerzas" y seleccionaron "proyectos basados en trabajos encetados o planteados a nivel de ciertas empresas importantes". "Solo faltaba darle un pequeño impulso, es lo que se hizo", ha revelado. Al respecto, ha admitido que no responde a una "estrategia de país" sino a otra "de reacción".