Torres do Allo: el primer pazo gallego de la historia nos abre sus puertas en Zas (A Coruña)
La casa solariega ofrece visitas abiertas al público y una gran programación de actividades para todas las edades
10 septiembre, 2022 06:00Si ves capilla, palomar y ciprés,… pazo es! Así reza el dicho popular gallego que sirve para identificar los edificios señoriales de la baja Edad Media. Cumpliendo con estos tres requisitos se alza el emblemático Torres do Allo en el Concello de Zas (A Coruña), considerado el primer pazo gallego con una antigüedad que se remonta a finales del siglo XV.
Sus más de 500 años de historia ofrecen una radiografía del poder nobiliario de la Galicia rural de la época, donde hasta el siglo XIX las casas solariegas eran el máximo exponente del señorío y la propiedad feudal. Y además, el entorno es un idilio.
Ya por el camino de llegada al pazo podemos ir deleitándonos con la gran hilera de robles y falsos plátanos que conducen hasta la plaza amurallada que alberga el edificio. Una vez dentro, dos grandes torres de estilo gótico tardío se alzan a distintas alturas unidas por el núcleo de una casa barroca y renacentista. En los alrededores del pazo, su enorme jardín con hórreos, el palomar, la fuente o la pequeña iglesia son algunos de los puntos de visita más habituales.
El pazo y su historia
En la actualidad, el Inventario Xeral de Patrimonio de la Xunta reconoce la existencia de 900 pazos localizados en el territorio gallego. Sin embargo, muchos de estos no son visitables puesto que son de titularidad privada y otro medio centenar están ligados a actividades comerciales, siendo restaurados como casas de Turismo Rural.
En este marco, la trayectoria del pazo Torres do Allo responde a la historia de la familia Gomes de Riobóo, vasallos de los Condes de Altamira, que tras la unión de ambos grupos por casamiento, deciden levantar el edificio. Tras su decadencia en 1950 por la falta de habitabilidad, en 1998, la Diputación de A Coruña compra el edificio, que se encontraba en estado de pleno abandono, e impulsa la rehabilitación del mismo como fomento del patrimonio cultural gallego.
Tras una primera intervención y la apertura al público como Museo y Centro de Información y Recursos Patrimoniales en 2005, un segundo proceso de reforma en 2021 y el refuerzo del museo etnográfico con recursos interactivos y espacios diferenciados, le ha valido el distintivo de Bien de Interés Cultural (BIC) de Costa da Morte.
Epicentro cultural
"El principal valor de las Torres do Allo, además del valor histórico que alberga su antigüedad, es que se trata de un pazo público y visitable" comenta Fabio, el actual guía de la casa solariega. Pero eso no es todo, sino que, como destaca el instructor, "el mayor atractivo es que se trata de un espacio donde, además de la visita, se ofrecen numerosas actividades para todas las edades donde puedes aprender pero también pasar tiempo de ocio".
La propuesta por convertir un pazo en un escenario de ocio ha reformulado el concepto de patrimonio cultural, permitiendo que el entorno se revitalice y la experiencia de los visitantes sea mucho más completa y cercana. Y parece que funciona. Tan solo el pasado mes de agosto, más de 2.000 personas se dieron paso por el edificio palaciego para disfrutar de un variado programa que acogió actuaciones musicales, visitas teatralizadas, desfiles de moda e incluso un escape room en el interior del recinto, denominado como Pazo Escape. La próxima cita será el 11 de septiembre, con la actuación de Os Quinquilláns.
Contrario a lo que se suele pensar de este tipo de edificios emblemáticos, la visita a las Torres do Allo se presenta como una gran excursión para los más pequeños, ya que además de la variada oferta que comentábamos anteriormente, el pazo ofrece actividades adaptadas a los distintos cursos escolares. "Ofrecemos talleres didácticos y creativos, yincanas o juegos en el jardín donde los más pequeños pueden aprender jugando", apunta Fabio. Próximamente, el pazo celebrará el Samaín con juegos populares, charlas y talleres.
Horarios y visitas
Llegados a este punto, podemos hacernos una idea de la belleza arquitectónica y la presencia histórica que albergan los muros y alrededores de esta casa señorial, pero son muchos los entresijos y particularidades que nos quedan por descubrir. Y como se suele decir, es mejor vivirlo a que te lo cuenten, por lo que desde el pazo, ofrecen varias propuestas de visitas para poder disfrutar solo, en grupos, o en compañía de la familia.
En cuanto a los horarios, las visitas guiadas serán de 13:00 a 17:30 horas, sujetas al periodo estacional. Empezando por la que más nos interesa, desde el 15 de junio y hasta el 15 de septiembre, el pazo estará abierto por temporada alta de lunes a viernes de 11:00 a 20:00 horas y los sábados y domingos de 11:00 a 21:00 horas. En cuanto a la temporada baja, las Torres podrán visitarse del 15 de septiembre al 15 de junio, salvo Semana Santa, y también sábados, domingos y festivos de 11:00 a 19:00 horas. En este periodo, durante el curso escolar, los centros interesados podrán realizar su visita los viernes.