Los siete atacantes que mataron a Santi están grabados: 2 magrebíes, 3 rumanos y 2 españoles
El joven de 17 años al que le dieron una paliza la madrugada del jueves en San Sebastián ha fallecido finalmente este domingo.
29 abril, 2019 02:34La familia de Santi ha confirmado este domingo lo peor, lo que lamentablemente ya se veía venir. Él es el joven de 17 años que la madrugada del viernes sufrió una paliza en San Sebastián y este domingo ha fallecido en el Hospital Donostia donde ingresó. Lo ha hecho tras pasar más de dos días con muerte cerebral a causa de los golpes.
Aunque residía con su padre en Reocín, Cantabria, Santi iba regularmente a la localidad vasca a visitar a su madre y a su hermano mayor que viven ahí. Tenía incluso sus propios amigos y era conocido entre los jóvenes de su edad. Pero todo se truncó por la más absurda de las discusiones.
Santi, su hermano y otro amigo salieron de fiesta el jueves por la noche por la zona del Club Náutico y del Ayuntamiento, un paseo marítimo con numerosos bares. Ahí fueron a la discoteca GU y, después de que el local cerrara, a escasos metros otro joven le interpeló para pedirle un cigarro a los tres.
Todo apunta a que Santi, su hermano y su amigo respondieron a la petición diciendo que no tenían tabaco, algo que no era verdad. En cuanto los otros lo descubrieron se desató una pelea que acabó con Santi en el suelo, donde le siguieron propinando patadas. Un conocido cercano a la familia ha relatado a este diario que una de ellas le acabó dando en el bulbo raquídeo y que por eso entró en la muerte cerebral en la que ha estado sumido hasta este domingo.
Los hechos tuvieron lugar poco después de las 5:10 de la madrugada, según recogieron las cámaras, y la Ertzaintza detuvo a un total de siete personas por participar en la pelea. Dos de ellos son de origen magrebí, tres de nacionalidad rumana y otros dos españoles. La mayoría de ellos, cuyas edades oscilan entre los 18 y 25 años, reside a las afueras de Irún y habían ido de fiesta a San Sebastián.
El grupo de detenidos declarará este lunes ante el juez encargado del caso. En un principio se iba a tomar el testimonio de dos testigos este domingo pero finalmente no ha sido posible. Por ello, el juez ha decidido pasar el interrogatorio al lunes.
Durante las diligencias judiciales, además, se visionará la grabación de una cámara que recogió la pelea al completo. Según han trasladado a EL ESPAÑOL fuentes cercanas al caso, la videocámara que grabó todo es una de las que hay en el Ayuntamiento y la disputa se ve nítidamente, por lo que no va a ser difícil dictaminar el grado de responsabilidad de cada uno en la pelea.
Los siete estaban detenidos por un delito de lesiones graves, una imputación que este domingo aumentará tras el fallecimiento de Santi. También resultaron heridos en el momento de los hechos el hermano y el amigo de Santi, aunque no están ingresados en el Hospital Donostia donde ha fallecido el joven.
La localidad de Reocín en la que vivía Santi es un pequeño municipio de poco más de 8.000 habitantes. Localizado cerca de Santillana del Mar, es el lugar de nacimiento de la familia de banqueros Botín. Tristemente, el lugar ha sido de nuevo ubicado en el mapa por una desgracia que también ha afectado al País Vasco.
La condena a estos hechos ha sido unánime en la política local. Arrancó el viernes con todos los grupos políticos del consistorio donostiarra trasladando su “solidaridad, cercanía y afecto a la familia del joven víctima de esta injustificable agresión”. Y ha concluido este domingo con un comunicado emitido por Eneko Goia, alcalde de San Sebastián. “He enviado mis condolencias a la familia del difunto. Me pregunto cómo se puede matar a alguien de una forma tan absurda. La Justicia y la Ertzaintza harán su trabajo”, ha asegurado el edil.