El sargento Gabriel, muerto apuñalado en una pelea en Murcia: dejó todo para entrar al Ejército
La Policía Nacional arrestó el día de Año Nuevo al agresor que supuestamente le clavó un cuchillo al mando militar en la Discoteca Ibiza.
3 enero, 2020 02:32Noticias relacionadas
Fue directo a darle la mano haciendo el ademán de disponerse a felicitarle el Año Nuevo y cuando llegó a la altura del sargento del Ejército de Tierra Gabriel Gonzalo Heredia sacó un cuchillo para clavárselo sin miramientos justo debajo del pecho. La puñalada fue certera, limpia y mortal de necesidad. “Yo salía del cuarto de baño cuando ‘Gabri’ vino directo hacia mí y comenzó a gritarme: ¡‘Cris’ me han apuñalado, ‘Cris’ me han apuñalado!”, tal y como relata totalmente devastado Cristian, el amigo íntimo de este mando militar que estaba destinado en la Base de Cerro Muriano de Córdoba y que perdió la vida durante una fiesta de Nochevieja celebrada en la Discoteca Ibiza de Murcia.
“Era la última salida que hacíamos los amigos antes de que ‘Gabri’ se marchara en misión internacional a Letonia”, precisa Cristian a EL ESPAÑOL sin poder dar crédito todavía al luctuoso final que tuvo el cotillón. El próximo 17 de enero era la fecha en la que debía partir al citado país de Europa Oriental el sargento del Regimiento Acorazado Córdoba X: Gabriel Gonzalo Heredia. Este mando militar nacido en Ecuador y con nacionalidad española se encontraba disfrutando de un permiso que había aprovechado para desplazase a la Región de Murcia en la que hace años residió junto a su madre y sus tres hermanos.
“Le conocí cuando me vine de Ecuador a vivir a España”. Cristian y Gabriel trabaron amistad en el municipio murciano de Mula y el objetivo del viaje del sargento era despedir 2019 en compañía de los amigos que hizo durante su adolescencia. “Cada vez que venía a verme a Mula salíamos por la zona de ocio de Atalayas que hay en Murcia”. En este punto de la capital murciana se concentran varias salas de fiesta de ambiente latino y la pandilla decidió despedir allí la última noche del año: “Habíamos comprado la entrada anticipada en la Discoteca Ibiza”. La velada era prometedora porque por 10 euros iban a disfrutar de un cotillón, champagne, un cubata y la música del DJ EX-Javier Salas.
“Gabriel, Ángel, Lizeth y yo quedamos directamente en la puerta del local después de tomarnos las uvas”. El ambiente del cotillón fue festivo hasta que pasadas las siete de la mañana los cuatro amigos se sentaron en una mesa. “Cuando yo me fui al cuarto de baño, ellos estaban riéndose en una mesa que está en medio de la pista de baile, entonces un tío se acercó a darle la mano a Gabriel y le dio una puñalada debajo del pecho”. Cristian no dudó un segundo en prestar auxilio a su amigo. “No paraba de gritarme: ‘¡Cris me han apuñalado!’ Le estuve presionando la herida con las manos porque sangraba mucho, a la altura de la barra comenzó a desvanecerse y tuve que tirar de él para sacarle a la calle”.
En la discoteca se generó un tumulto de gente que no sabía qué estaba ocurriendo y el agresor aprovechó para darse a la fuga. “Cuando llegamos al aparcamiento le dije a mi amiga Lizeth que siguiera taponando la herida mientras yo llamaba a una ambulancia y entonces comenzaron a llegar coches de la Policía Nacional”.
-¿El agresor apuñaló a su amigo sin mediar palabra?
-No hubo discusiones ni peleas. Parece que este tío se acercó a la mesa a darle la mano y lo que hizo fue darle una puñalada.
“Ha sido el hermano de Carla”
El sargento, de 31 años, estaba con la guardia baja y la hoja del cuchillo se hundió en su abdomen: ingresó en estado grave en el Hospital Reina Sofía y le operaron de urgencia. “Después de la intervención entró en parada y murió”. Cristian no puede dejar de darle vueltas a las últimas palabras que pronunció su mejor amigo en el aparcamiento de la discoteca antes de ser introducido en la ambulancia: “Ha sido el hermano de Carla”. La mencionada joven, de nacionalidad ecuatoriana, era amiga del fallecido y también se encontraba en la misma sala de ambiente latino asistiendo a la Fiesta de Nochevieja. “Gabriel y Carla siempre han tenido una amistad muy íntima, les gastábamos bromas diciendo que eran novios, pero no tenían ninguna relación sentimental”.
De momento, la Policía Nacional ha detenido al supuesto autor de este homicidio, pero desde la Jefatura Superior no han confirmado si se trata del hermano de Carla. Un portavoz policial ha informado que el 1 de enero fue arrestado un joven, natural de Ecuador y con nacionalidad española. “Se están investigando los motivos de la agresión con arma blanca y si existía algún tipo de relación previa entre agresor y víctima”. Este viernes se espera que este chico de 27 años sea puesto a disposición judicial.
Desde la Discoteca Ibiza no han facilitado datos sobre el presunto agresor, pero dejan caer que se trata de una persona conflictiva: “Cualquier información la tiene que facilitar la Policía Nacional, pero aquí habría que preguntarse qué hacía ese hombre en la calle porque parece que era una persona reincidente y que había causado otros problemas en otras zonas de ocio en Murcia”. De hecho, algunos amigos del militar fallecido aseguran que el detenido apuñaló a otra persona en otro local de copas de la capital durante la pasada Nochevieja.
El sargento será enterrado en Murcia
Este viernes, a las 11 horas, en el tanatorio de Atalayas se celebrará la misa funeral del sargento del Regimiento Acorazado Córdoba X. “Murcia siempre fue una tierra que recibió bien a mi hermano y que lo trató bien, por eso hemos decidido enterrarlo aquí”, explica a este diario entre lágrimas Rubén Heredia, de 45 años. “Mi madre será la que decidirá qué hacer con las cenizas de Gabriel”, sentenciaba con impotencia el hermano mayor del difunto mientras avanzaba que ya han contratado los servicios de un abogado. “Nos vamos a personar como acusación particular para pedir que se haga Justicia”.
La muerte de este mando militar ha conmocionado a la amplia comunidad de ecuatorianos que residen en la Región porque este joven, soltero, de 31 años, solía regresar con frecuencia para no romper sus lazos con sus amigos. “Mi hermano ‘Gabri’ nunca perdió el contacto con sus amistades”. Tanto a las que conoció entre 2004 y 2008 cuando estuvo residiendo en el municipio de Mula como en los años que estuvo cursando sus estudios, primero, en el Colegio Maristas de Murcia, y más tarde, en la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT). “Mi hermano era muy buen estudiante y en 2009 cuando estaba estudiando una Ingeniería Industrial en la universidad, de repente, decidió prepararse las pruebas para convertirse en militar”.
De esta forma Gabriel seguía los pasos de su padre que antes de morir a causa de una enfermedad estuvo sirviendo en la Marina de Ecuador y de su hermano mayor, Rubén, que también había formado parte del Ejército ecuatoriano. “Su primer destino fue Paracuellos de Jarama en Madrid, en el año 2010, y después se especializó en el mantenimiento de carros de combate acorazados y blindados”.
Esta especialización provocó que Gabriel cambiara de destino pasando de la Base Príncipe de Madrid a la Base de Cerro Muriano: la más importante de las tres instalaciones militares que hay en Córdoba. Allí empezó a prestar sus servicios con eficacia en el Regimiento Acorazado Córdoba X, una unidad del Ejército de Tierra que está encuadrada en la brigada orgánica polivalente ‘Guzmán el Bueno’ X. Un buen ejemplo de la dedicación que demostró en la provincia andaluza es que llegó a sargento y quería seguir ascendiendo, tal y como lamentaba su hermano mayor en conversación telefónica con este diario: “Tenía previsto retomar sus estudios a distancia”. De haber acabado la carrera de Ingeniería Industrial que inició en la UPCT podría haber seguido progresando dentro de la escala militar.
Su hermana, sin visado
Este mando militar siempre se esforzó por cumplir con los exigentes requisitos de la Brigada ‘Guzmán el Bueno’ X cuyo lema no deja lugar para las dudas: "Sed fuertes en la guerra". Tal era su dedicación que para estar físicamente a tope, al margen de la rutina diaria del acuartelamiento, también solía correr pruebas de media maratón. “Era un gran aficionado al deporte y le encantaba ver los partidos de fútbol del Barcelona”. El sargento Gabriel Gonzalo Heredia había participado en unas maniobras en Noruega en octubre de 2018 y el próximo 19 de enero se marchaba de misión internacional a la República de Letonia. “Precisamente ahora estaba disfrutando de sus vacaciones, nos acabábamos de ver en Madrid porque quedamos allí para pasar las Navidades con mi tía”, rememorada apenado Rubén.
El viernes 27 de diciembre se despidieron: Rubén regresó a Zaragoza donde trabaja en una empresa y Gabriel se fue a Murcia a pasar la Nochevieja con los amigos. “Pasé mi última Navidad con él porque perdió la vida fatídicamente”, se repetía sin consuelo una y otra vez. En estos 11 años en el Ejército de Tierra, a pesar de la dura disciplina militar y de que estaba destinado en Córdoba, el sargento, al que sus hermanos llamaban ‘Gabri’, nunca había descuidado a su familia: “Siempre hacíamos reuniones familiares y la tecnología nos mantenía unidos de alguna manera porque solíamos hacer vídeo llamadas simultáneas para hablar todos a la vez porque mi madre y mis dos hermanas regresaron a Ecuador”. De hecho, una de ellas por culpa de la burocracia no podrá asistir este viernes al entierro en Murcia: “No le han dado el visado”.
Este jueves las redes sociales eran un hervidero de comentarios de cariño hacia el que muchos ecuatorianos en la Región de Murcia conocían cariñosamente como El Flaquito. En señal de duelo colocaron en sus cuentas personales de Facebook un crespón junto a una rosa negra. “Gabriel siempre estaba de broma y enseñando su gran sonrisa”, rememoraba con cariño Vero.