Juan Ramón Amores, alcalde de La Roda (Albacete).

Juan Ramón Amores, alcalde de La Roda (Albacete). Twitter

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Ramón, el alcalde con ELA con miedo a vacunarse: no quiere le tomen como otro aprovechado más

“Que nadie piense que me han llamado por ser alcalde”, ha explicado el edil de La Roda (Albacete) en un comunicado en su Twitter. 

21 enero, 2021 13:38

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“Me llamo Juan Ramón Amores, tengo ELA, tengo un grado dos de dependencia y un 68% de discapacidad y no, no me he vacunado contra el coronavirus”. El alcalde de La Roda (Albacete) sufre esclerosis lateral amiotrófica, la enfermedad degenerativa más grave, sinónimo de una cuenta atrás hacia la muerte. “Os confieso que tengo miedo de que alguien diga que es por mi puesto”, ha expresado el alcalde en su cuenta de Twitter. Se refiere al momento en que reciba la vacuna de la Covid. “Que nadie piense que me han llamado por ser alcalde”. Amores es población de riesgo extremo.

La semana pasada surgió la polémica de trato de favor a algunos alcaldes a la hora de recibir la inyección de Pfizer. Hay cinco alcaldes: de Torrecampo (Córdoba), El Verger y Els Poblet (Alicante), Rafelbunyol (Valencia) y el primer edil de JxCat del municipio tarraconense de Riudoms que, sin ser usuarios de residencias o sanitarios, han recibido la vacuna. También un agente de la Policía Local.

La mayoría de ellos alegaron que han preferido ponérsela a que las tiren a la basura. El PSOE, sin embargo, no compartió esa opinión y el pasado domingo abrió un expediente y ha suspendido de militancia a los alcaldes de El Verger, Els Poblet y Rafelbunyol.

“Yo quiero defender que hay muchos más políticos que no lo hacemos, que los que han hecho ese acto que me parece ilógico”, asegura Amores en su comunicado, en el que se le puede ver afectado de cierta parálisis propia de su enfermedad.

“En los últimos días hemos visto cómo ciertos políticos utilizando su puesto supuestamente se han vacunado cuando no les tocaba”. A él le tocará vacunarse, probablemente, antes que a muchos de sus vecinos, pero no por trato de favor. Amores sufre un 68% de discapacidad. “No me he vacunado, pero estoy deseando hacerlo”.

Caos de campaña

La campaña de vacunación contra la Covid está presentando muchos problemas logísticos. Las inyecciones de Pfizer se distribuyen en viales de seis unidades. Por lo general, se intenta que los pacientes que la reciben en un día cuadren en múltiplos de seis para que no sobre ninguna dosis. Sin embargo, por circunstancias ajenas, puede ser que algún sanitario no quiera vacunarse o no pueda por estar enfermo o, incluso, por haber dado positivo unas horas antes de su confirmación.

Esto ha dado pie a picarescas como las de los alcaldes arriba citados o a que haya hospitales y centros de salud que hayan tenido que tirar dosis a la basura, tal y como constató este periódico. Otros adaptaron su calendario de vacunación sobre la marcha.

Por ejemplo, el fin de semana de la nevada en Madrid, en el Hospital de Móstoles había un listado confeccionado para vacunar a unas 80 personas. "Si se te caen la mitad, ¿qué haces con todas esas vacunas que estaban previstas ponerse? Pues no las vas a tirar. Se ha intentado aprovechar los recursos", explicaba un sanitario del citado centro.