Habla Javier, el bodeguero acusado por Igualdad de "cosificar a la mujer" por la etiqueta de su vino
El Instituto de Mujeres, dependiente de la cartera de Irene Montero, remitió una carta el pasado lunes pese a que el vino lleva 13 años a la venta.
30 noviembre, 2022 19:39Una acuarela de la espalda de una mujer que apoya, en bikini, su mano sobre la cadera. También se adivina un glúteo. Es la etiqueta de un vino leonés pintada en 2009 por un autor catalán, Josep Moscardó, contra la que 13 años después se ha rebelado el Ministerio de Igualdad. El Instituto de las Mujeres, dependiente de la cartera de Irene Montero, considera la pintura machista. Por eso ha instado a la bodega Almázcara Majara a retirarla por "utilizar la imagen de la mujer como objeto sexual".
El Ministerio considera que "destacando la parte baja de la espalda y los glúteos" la bodega trata a la mujer de "forma vejatoria", como un "objeto sexual". Y que se "favorecen", además, "actitudes discriminatorias". Javier Álvarez, dueño de la bodega junto a otros dos socios, Manuel Benito y Raúl García, está que fuma en pipa. Nunca hubiera pensado que la etiqueta escogida para Demasiado Corazón, un Godello puesto a la venta hace más de una década, generaría polémica. Que pisaría donde no debiera en una sociedad minada.
"Buen rollo", es lo que asegura Álvarez, en conversación con este periódico, que buscan transmitir los tres socios con sus vinos. Una bodega en la DO Bierzo creada en 2002. Ma-Ja-Ra responde a las iniciales de cada uno de sus tres fundadores.
—Asegura el Ministerio que infrigren el artículo tercero de la Ley General de Publicidad.
—Es bastante indignante —responde Álvarez en conversación con este periódico—. La etiqueta está en Demasiado Corazón, uno de nuestros vinos más prestigiosos, desde el año 2009. No es que sea algo nuevo, de ahora. Ha sido un vino muy premiado, presente en muchos eventos y restaurantes importantes. Nunca, nadie en 13 años, nos había hecho ningún comentario sobre que le parecía ofensivo o inapropiado. Lo consideramos una obra de arte, como lo que es.
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En la carta, recibida el pasado martes por esta bodega de Molinaseca (León), el Ministerio considera que la campaña publicitaria "no justifica la cosificación femenina que emana del anuncio". También haber recibido quejas sobre la valla. Javier asegura que con "la mujer mirando el horizonte" que figura en la etiqueta buscaban transmitir el "carácter mediterráneo" del vino. "Transmite la frescura que queríamos irradiar para un vino blanco", concreta. "Sol, mar y una mujer en bikini con corazones".
"Es un cuadro de una inocencia absoluta", sigue Álvarez. "Cualquiera que vea algo más allá de lo que hay es realmente quien está enfermo y tiene un problema grave".
—¿Van a retirar la valla? ¿Les han anunciado algún tipo de consecuencias si no lo hacen?
—Llamamos y nos dijeron que teníamos que escribir nuestras alegaciones. Hemos mandado una carta explicando que debe ser un malentendido. Si se mira la historia de la bodega, donde siempre jugamos con diferentes cuadros de diferentes pintores, hemos ido muy unidos al arte.
En Cobija del Pobre, otro de sus godellos, la pintura es una sauna compartida por hombres y mujeres. En Aphrodisiaque Mencía es el torso de un hombre. En Jarabe de Tintorera dos mujeres boxean en traje de baño. "Nunca se han quejado de las otras etiquetas", se sorprende el dueño de la bodega. "No hacemos nada sexual en una dirección o en otra", justifica.
La respuesta de la bodega
Este miércoles respondieron por escrito. La carta la firma Encina Otero Álvarez, trabajadora y representante de la Bodega Encima Wines, donde los tres amigos elaboran sus vinos. La representante comienza su carta asegurando comprender y compartir "la labor que desempeña no solo el Instituto de las Mujeres, sino también el Ministerio de Igualdad". Nada beligerante. "Me gustaría constatar que nosotras, en ningún momento hemos pretendido sexualizar nuestros vinos ni la publicidad que hacemos de ellos".
Otero Álvarez expone algunos de los argumentos aportados por Javier a este periódico. Destacando que las etiquetas tuvieron "SIEMPRE [sic] con una intencionalidad artística que relaciona obra-autor con nuestros productos: los vinos... y por supuesto sin ninguna connotación sexual, sexista o de humillación a la mujer".
Y remata: "No compartimos el requerimiento de retirar este o cualquier otro contenido por todo lo expuesto anteriormente. Puesto que creemos en la expresión artística y en el arte como forma de combinarlo nuestro trabajo; que no es otro, que hacer vino. Además vuelvo a dejar constancia de que no estamos ni mucho menos en contra de la labor que hace tanto el Instituto de las Mujeres como el Ministerio de Igualdad".