La china 'I am not Madame Bovary' da la sorpresa y gana la Concha de Oro
El cine español caza dos premios: Mejor Guion para 'Que dios nos perdone' y Mejor actor para Eduard Fernández por 'El hombre de las mil caras'.
24 septiembre, 2016 22:05Noticias relacionadas
La prensa ayer estaba perdida. Había terminado la Sección Oficial del Festival de Cine de San Sebastián y no había una clara favorita por la Concha de Oro. Y eso que no sirve de nada ser la preferida de la crítica, ya que pocas veces coincide con lo que el jurado elige, pero la sensación era de desconocimiento. Nadie sabía por dónde podían ir los tiros. Las propuestas más arriesgadas, como Nocturama, tienden a polarizar y otros grandes filmes como El hombre de las mil caras tienen un toque comercial y demasiado local para llevarse el premio gordo. Viendo que el presidente era Bille August parecía incluso lógico que un título como Lady Macbeth, uno de los más sólidos, se alzara con la victoria. Tampoco fue así. La tercera vía se decantó por el cine asiático, que acaparó los principales galardones en una decisión sorprendente.
I am not Madame Bovary, de Feng Xiaogang, se llevó la Concha de Oro, pero también la de plata a la Mejor Actriz para Fan Bingbing. El festival premia así a una de las grandes estrellas que pisó la alfombra roja el primer día dejando boquiabierto al personal, que se preguntaba quién era esa actriz asiática que acaparaba todos los flashes. Bingbing ha vuelto a Donostia para recoger uno de los premios más injustos de la noche. No ha habido muchos papeles femeninos de peso, pero había uno que congregó todos los halagos del público, el de Florence Pugh en esa Lady Macbeth que se conforma con el premio FIPRESCI de la crítica internacional.
I am not Madame Bovary es una película con una interesante propuesta y una decisión estética arriesgada. Todo se ve a través de un agujero que delimita al pueblo y de un cuadrado a la gran ciudad en esta comedia en la que una mujer desafiará a todo el estado chino. Una película lastrada por su estructura repetitiva y una duración eterna, además de uno de los momentos más polémicos vividos en el certamen. Tras una escena de violación la protagonista queda enamorada inmediatamente del abusador, algo que el director defendió en la rueda de prensa con un “a veces cuando una mujer dice 'no', quiere decir 'sí'". Una salida de tono que le podía haber costado la Concha de Oro.
Uno de los nombres más prestigiosos de los que vinieron, Hong Sangsoo, se alzó con la Concha de Plata al Mejor director por Yourself and yours, en la que indaga en las constantes de su cine, la repetición como forma de alcanzar la perfección. Una película con un universo muy personal en la que los que entran la disfrutan a lo grande. Un galardón que encumbra a uno de los nombres más importantes del cine de autor actual.
El cine español no se fue de vacío a casa. Rodrigo Sorogoyen e Isabel Peña ganaron el premio al Mejor guion por Que Dios nos perdone, precisamente este es el apartado más flojo de la película, que todos colocaban como favorita para el premio al Mejor actor para Roberto Álamo. Ha sido un compatriota, Eduard Fernández, el que le ha robado el premio. Fernández está perfecto como Paesa y este premio supone un empuje en la promoción de El hombre de las mil caras, una de las mejores películas españolas del año. Alberto Rodríguez demuestra de nuevo que es un gran director de actores, ya que con La isla mínima esta misma mención fue para Javier Gutiérrez. Un Fernández muy emocionado ha dedicado el premio al propio espía.
El idilio de los intérpretes españoles con los premios de interpretación se perpetúa, desde 2009 un actor o actriz de nuestro país se lleva la Concha de Plata. A la lista de Pablo Pineda y Lola Dueñas, Nora Navas, María León, José Sacristán, Marian Álvarez, Javier Gutiérrez, Ricardo Darín y Javier Cámara se une ahora Eduard Fernández. La otra película española se fue de vacío. La reconquista, la apuesta más arriesgada de las tres a concurso, no convenció al jurado con su mirada personal al primer amor. El jurado concedió también su premio especial ex-aequo a The Giant y la argentina El invierno. Poca presencia latina en el palmarés de esta 64 edición.
Las dos propuestas más radicales y provocadoras de la Sección Oficial se vieron ninguneadas. Nocturama no rascó premio. Bonello tiene que estar dándose de cabezazos en algún lugar de París. Una obra importante que tenía que haberse llevado premio. El otro título, Playground, que causó indignación en muchos por su explícita última escena en la que unos niños mataban a otros en un plano fijo y distante que helaba la sangra, no convenció. El jurado da la razón así a los que se posicionaron acusándola de moralmente reprobable.
Es curioso que en una edición en la que ha habido propuestas muy arriesgadas, hayan sido filmes tan tibios los que han conseguido los máximos galardones. Veremos qué tal funciona esta I am not Madame Bovary en taquilla, ya que las últimas ganadoras no han conseguido enganchar al público a pesar de la Concha de Oro.
Palmarés Completo
Concha de Oro: I'm not Madame Bovary, de Xiaogang Feng (China).
Premio especial del Jurado: ex aequo para El gigante (Suecia) y El invierno (Argentina).
Concha de Plata a mejor dirección: Hong Sang-soo, porYourself and yours (Corea).
Concha de Plata al mejor actor: Eduard Fernández por El hombre de las mil caras.
Concha de Plata a la mejor actriz: Fan Bingbing, por I'm not Madame Bovary (China).
Mejor guion: Isabel Peña y Rodrigo Sorogoyen, por Que Dios nos perdone.
Mejor fotografía: Ramiro Civita, por El invierno (Argentina).
Premio Horizontes Latinos: Rara(Chile), de Pepa San Martín.
Premio Nuev@s Director@s:Park, de Sofia Exarchou (Grecia).
Premio Tabakalera-Zabaltegi:Eat that Question: Frank Zappa in his own words, deThorsten Schüte (Francia, Alemania).
Premio de la Juventud: Bar Bahar, de Maysaloun Haoud (Israel).
Premio del Público: I, Daniel Blake, de Ken Loach (Reino Unido).
Premio La otra mirada: Bar Bahar, de Maysaloun Haoud (Israel).