Un increíble Hulk que atrape en sus poderosos brazos las bombas de barril que arrojan desde los helicópteros las Fuerzas Aéreas del presidente Bashar al Asad. Un Iron Man que detenga los misiles lanzados por los cazabombarderos rusos que le apoyan. Un Capitán América que baje al polvo y se interponga para lograr un alto el fuego duradero. "Los sirios estamos recurriendo a la fantasía para sobrevivir a la realidad", denuncia una campaña que monta viñetas en las que los superhéroes de Marvel protegen a la población, en especial a los niños, de Alepo.
Se trata de una iniciativa de RFS, el órgano de comunicación de los rebeldes del Ejército Libre Sirio que, cada vez más debilitados, resisten desde hace más de cinco años el asedio de las tropas gubernamentales a la segunda ciudad en importancia del país detrás de la capital Damasco. "Tras los inútiles llamamientos y ruegos, y tras los vanos lamentos y condenas, recurrimos a la fantasía, los cómics y las películas para dar vida a los superhéroes que salven a los sufrientes y afligidos sirios" - aseguran en el comunicado.
El hashtag #AvengersInAleppo que acompaña a la campaña en las redes sociales "envía un mensaje al mundo: vuestro silencio y vuestra complacencia nos está matando y obligando a huir". Este verano, el RFS logró un importante eco con una campaña parecida que aprovechaba el furor del juego Pokémon Go: niños sirios de la zona ocupada por los rebeldes de Kafr Nabl, en el noroeste del país, sujetaban ilustraciones de los populares monstruitos para que a ellos también los vinieran a buscar.
Los montajes recuperan a los personajes de las películas de Disney y los contraponen al paisaje devastado por la guerra de Alepo, poniendo a los superhéroes a salvar su ciudad de la ruina tal y cómo han hecho en sus diversas encarnaciones cinematográficas.
Como ya ocurrió en el caso de la campaña de los Pokémon, niños y ciudadanos sirios también han posado con las ilustraciones y mensajes para la comunidad internacional en los que piden que no les abandonen.
Siete millones y medio de niños se han visto afectados por la guerra en Siria, según datos que cita el medio norteamericano Aplus, ya sea por vivir directamente en la zona de conflicto o por haberse visto obligados a engrosar, en solitario o acompañando a sus familias, la crisis humanitaria de refugiados que Europa no ha terminado de resolver. Uno de cada tres niños de Alepo ha nacido en estos últimos cinco años, añade la triste estadística: no han conocido otra cosa que la guerra en sus cortas vidas.
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