La familia de la niña de ocho años agredida por sus compañeros de colegio en Palma denunciará al Govern balear, a la dirección del centro educativo y los supuestos agresores después de que la Consellería de Educación diese por cerrado el caso con un informe de los inspectores en el que se descartaba "completamente" que la chica fuese víctima de acoso escolar.

Así lo aseguran a EL ESPAÑOL fuentes próximas al abogado que se encargará de llevar el asunto a los tribunales, Marcos García Montes. En concreto, ultima querellas contra la Consejería de Educación y Universidad, liderada por Martí March y contra la dirección del Anselm Turmeda de Palma. También una denuncia ante la Fiscalía de Menores contra aquellos alumnos que participaron en la paliza y que serían menores de 14 años.

Desde el bufete de abogados consideran que el informe hecho público por el Govern (PSOE) este martes no aclara los "puntos principales" del caso. Estos son, a su juicio, por qué ningún docente del colegio público de Infantil y Primaria se percató de la paliza que un grupo de niños -doce chicos según la familia y siete según la versión de Inspección Educativa- propinó a la chica de 3º de Primaria tras una supuesta disputa por la posesión de un balón de fútbol.

Otro de los puntos polémicos de ese informe es que no existió un acoso previo a la niña tal y como denunciaba la familia tras saltar la noticia a los medios de comunicación. Según su hermana, tal y como declaró a este diario, la chica era el blanco de insultos desde que pasó "al patio de los mayores" por su afición por el fútbol: "Le gritaban marimacho". 

Así, el despacho de abogados centraría parte de esas querellas contra los menores, profesores y políticos por el hecho de que sí había acoso escolar desde el inicio del curso y por no estar el patio vigilado por docentes, en su opinión, durante la agresión.

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