Homenaje a la emigración en Vigo: representación en bronce de los que tuvieron que partir
El conjunto escultórico, realizado por Ramón Conde, se encuentra en el acceso a la Estación Marítima y representa a todos aquellos gallegos que partieron rumbo a América buscando nuevas oportunidades
26 noviembre, 2020 06:00El conjunto escultórico conocido como Homenaje a la emigración representa a un hombre con una maleta en la mano a punto de entrar en la Estación Marítima de Vigo, su familia se encuentra a varios metros detrás de él, despidiéndole. La escultura se inauguró en el año 2011 fruto del proyecto de humanización de la zona de A Laxe.
La obra recibe a todos aquellos que, una vez desembarcan de los grandes cruceros que atracan en Vigo, ponen sus pies en la zona portuaria. Una interesante imagen fruto de la ironía, un encuentro entre los que vienen por ocio con la imagen en bronce de los que se marchaban por necesidad.
Igual que ahora, grandes barcos adornaban el puerto de Vigo. Aunque con menos lujos, el movimiento de la emigración abastecía al puerto y a los negocios de alrededor como hacen los turistas a día de hoy.
Su autor, el escultor ourensano Ramón Conde, señaló que la obra “refleja al emigrante cargado de ansia y de fuerza que va a la lucha desconocida, a la mujer que se queda al cargo de la educación del hijo y al niño que es la imagen de la esperanza”.
El Puerto de Vigo: escenario de despedidas
A mediados del siglo XIX, fueron muchos los hombres y mujeres gallegos que tuvieron que coger sus maletas y viajar rumbo a América con la esperanza de encontrar oportunidades de trabajo que los sacasen de las dificultades que aquí vivían.
Muchos de esos viajes, que en ocasiones partían del Puerto de Vigo, eran sin retorno. Tras largas travesías en barco, los emigrados llegaban al continente prometido. Países como Argentina acogieron a gran cantidad de gallegos emigrados, dando lugar a que parte de la historia de Galicia se encuentre en el país hermano.
Pero la historia de la emigración gallega no terminó en el siglo XIX, ya que se sucedieron varias etapas en las que muchos decidieron abandonar sus hogares y familias. Después de la II Guerra Mundial también se produjo un incesante período emigratorio que duró hasta los años 50-60.
Ramón Conde en Vigo
Esta escultura no es la única que el artista ourensano tiene en la ciudad olívica. En Vigo, podemos encontrar otras de sus creaciones como El corredor, en la Avenida de Florida; El Titán, en el Hospital Álvaro Cunqueiro; El Gran Inquisidor, en el centro comercial Gran Vía, o Los Rederos, también conocida como Monumento al trabajo o Los forzudos, que se encuentra en la calle Gran Vía.
La mayoría de las obras del escultor Ramón Conde destacan, además de por su estilo rompedor, por su fuerte carácter social, como es el caso de Homenaje a la emigración.