Cientos de personas hacen cola para probar los nuevos gofres de la calle Príncipe en Vigo

La ciudad de Vigo tiene muchos símbolos que la representan, sin embargo, hay uno que destaca por ser especialmente delicioso: los gofres de Príncipe.

El pequeño negocio de la calle más multitudinaria de Vigo llevaba tres décadas abierto. Un lugar de los de antes, solo cobraban en efectivo y, aunque ya mucha gente se muestra reacia a esta modalidad de pago, nadie se quejaba, merecía la pena. Rebuscar en lo más profundo del bolsillo para encontrar las monedas necesarias para degustar esa deliciosa masa caliente, en ocasiones bañada en chocolate, era el acontecimiento preferido de aquellos que pasaban una tarde ajetreada de compras en el centro de Vigo.

Cuando a principios del mes de septiembre sus dueños anunciaron el cierre por jubilación, algo se apagó en el corazón de los vigueses. No podía ser, el local más mítico de la ciudad olívica cerraba sus puertas. Se acababan las largas colas, el delicioso olor que recorría la calle desde la farola hasta el sireno… Muchos aseguraban que nada volvería a ser lo mismo.

Se acabó la nostalgia: Los gofres de Príncipe han vuelto

El 2020 ha sido un año indudablemente duro pero, a poco más de una semana de terminar, nos trae un acontecimiento muy esperado por todos.

Ya en noviembre saltaban las alarmas, alguien había cogido el relevo de los gofres de Príncipe. Aún sin fecha de apertura, la ilusión crecía entre la ciudadanía, que ya se había encargado de poner velas y flores en la puerta del establecimiento, en un curioso acto de homenaje.

Hoy, por fin es una realidad. Los gofres de Príncipe han vuelto a abrir sus puertas. Una nueva propuesta adaptada a los nuevos tiempos. Cuentan con redes sociales, una estética moderna con luces de neón y colores estridentes pero, sin dejar de lado lo que realmente caracteriza a este negocio, el olor y el sabor.

Mantienen el nombre y la esencia

El pequeño negocio nace manteniendo el nombre de su predecesor. Otra cosa que no ha cambiado es la larga cola que los acompaña, la apertura ha sido todo un éxito. "Una acogida increíble, muy bien, vendimos todos los gofres en una hora. Ojalá fuera así siempre, otros treinta años", asegura su propietario, John Álvarez. Desde luego, había muchísimas ganas de comerse un buen gofre.

En horario ininterrumpido de 9:30 a 21:30, por 2,20 euros, los vigueses vuelven a poder disfrutar de este delicioso postre, 2,50 euros en el caso de añadir nata o chocolate. Además, como novedad, el local ofrece helados 100% naturales, una opción muy interesante que también se puede combinar con el gofre.

Parece que uno de los regalos de Nochebuena se ha adelantado unos días en la ciudad de Vigo, que hoy es un poco más dulce.