El sencillo truco para limpiar las persianas por fuera en un piso alto: superfácil y rápido
Lo que antes podía aparentar ser una misión casi imposible, se transforma en una tarea más sencilla con este método.
3 julio, 2024 15:58La tarea de realizar una limpieza profunda en el hogar puede causar tanto estrés como una sensación de satisfacción. Algunas personas disfrutan de estos momentos de organización y pulcritud, mientras que otras prefieren postergar esta actividad, esperando un momento más conveniente.
La dificultad se incrementa al abordar áreas del hogar que no necesitan atención semanal y que suelen pasarse por alto, ya que es improbable que alguien note su estado de suciedad. Un ejemplo de estos rincones olvidados son las persianas.
Limpiar las persianas es una labor que frecuentemente se convierte en un reto. Puede ser complicado dejarlas tan limpias como cuando eran nuevas, y esto a menudo nos lleva a abandonar la tarea. El proceso de limpieza de persianas no es tan simple como cambiar la ropa de temporada o poner el lavavajillas. Requiere tiempo y esfuerzo, especialmente en el caso de las persianas exteriores, que están expuestas directamente al ambiente exterior.
Muy difíciles de limpiar
Cuando no vivimos en una planta baja o en una vivienda unifamiliar, este procedimiento se vuelve considerablemente más complicado, llegando a parecer una tarea imposible. Entre las estrategias sugeridas para limpiar las persianas se encuentran introducir el brazo a través del espacio inferior, contorsionarse para asomarse por la ventana, o inclinarse sobre el alféizar para dejarlas relucientes.
No obstante, no es necesario poner en riesgo la integridad personal durante este proceso. La solución siempre ha estado delante de nosotros, aunque nunca la hayamos notado. Un elemento que hemos pasado por alto y subestimado se convertirá, a partir de ahora, en el aliado que hará este proceso mucho más manejable.
La clave, en el cajón
El método consiste en abrir el compartimento donde se guarda la persiana. Cuando la enrollamos, esta se almacena en un espacio situado por encima de la ventana.
A menudo, el compartimento está cerrado herméticamente o puede ser algo difícil de abrir. No te preocupes si requiere un poco más de esfuerzo. En ocasiones, el compartimento puede tener tornillos o enganches en la parte frontal. Averigua cómo abrirlo y, una vez que lo logres, habrás superado la mayor parte del desafío.
Con la persiana enrollada frente a ti, puedes usar un paño con agua y jabón neutro o un cepillo, según prefieras. Pasa el paño o el cepillo por toda la parte visible de la persiana que está fuera del compartimento. Sigue de manera gradual, bajando la persiana para acceder a todas las áreas enrolladas y eliminar cualquier suciedad adherida. Para una limpieza más profunda, el vinagre de limpieza o el amoníaco son opciones efectivas.
Es fundamental asegurarse de que el compartimento esté limpio antes de cerrarlo de nuevo, para evitar ensuciar la persiana en el futuro. Una vez que hayas terminado, cierra el compartimento y ahora solo queda la parte más sencilla: limpiar la persiana desde el interior.
Un último consejo importante es no enrollar la persiana hasta que esté completamente seca, ya que hacerlo podría causar malos olores y humedad. Puedes eliminar el exceso de agua con un paño seco. Deja de posponer la limpieza de la persiana exterior, y si lo has estado retrasando, que no sea por considerar el proceso complicado. En solo 10 minutos, podrás devolverle su aspecto original.