La Junta se pone el deber de convertir la economía social en el "gran aliado" en la lucha contra el reto demográfico

La directora general de Economía Social y Autónomos la Junta de Castilla y León, Emma Fernández Rodríguez, ha mostrado este jueves la intención del Ejecutivo autonómico en convertir la economía social en el "gran aliado" contra el reto demográfico.

Durante la clausura del foro 'La fuerza de la economía social: 2025, año del cooperativismo', organizado por EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León y el Consejo Económico y Social de Castilla y León (CESCyL) ha defendido los argumentos de la apuesta de la Junta por este sector.

En este sentido, se ha referido a la economía social y el cooperativismo como una "fórmula con un gran futuro" y ha recalcado que durante años no ha sido posible cuantificar "cuál es su fuerza".

"Sabíamos que era una fórmula económica y empresarial muy beneficiosa para nuestra tierra y por eso hace 20 años la Junta lo tuvo bastante claro, siendo de las primeras administraciones que encomendó de forma expresa la promoción de la economía social a un centro directivo propio", ha recordado.

Un trabajo de dos décadas que se ha traducido con diferentes iniciativas, como las llevadas a cabo este 2024, con actuaciones que "demuestran y cuantifican" el papel de la economía social en Castilla y León.

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Precisamente, uno de ellos es el informe del impacto socioeconómico del sector, desarrollado con un modelo metodológico que ha sido seleccionado por Naciones Unidas como "ejemplo de buena práctica en la medición de impacto".

"Ha demostrado que estás fórmulas económicas y empresariales tienen un comportamiento diferencial con respecto a la economía mercantil", ha incidido Fernández Rodríguez. 

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Así, ha asegurado que "contribuyen al bienestar y la utilidad colectiva de nuestra tierra", provocando un favorecimiento de la "cohesión social y vertebración territorial".

De esta manera, en las conclusiones del informe se expone que la economía social "crea oportunidades de empleo más inclusivo, fomenta una mayor estabilidad o genera menor dispersión salarial".

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También fomenta "mayores niveles de igualdad en las empresas y amplía la oferta privada de servicios que mejora la calidad de vida de las personas".

Motivos por los que para la directora general "sobran los argumentos para justificar que desde la Junta hayamos trabajado para articular numerosas iniciativas en el fomento de la economía social".

Precisamente, se ha referido al primer plan estratégico de fomento de la economía social 2023-2025, que contempla 27 medidas de fomento, tres planes de acción anuales y una inversión total de más de 113 millones de euros.

Igualmente, ha destacado que "no es posible reforzar la estrategia si no hay recursos" y por eso la Junta ha incrementado la inversión en un 49% desde que se inició la legislatura. "Esto ha permitido mejorar la competitividad de más de 500 empresas beneficiando a casi 7.000 trabajadores", ha destacado.

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Para Fernández Rodríguez es un "modelo que se ha demostrado idóneo para la generación de un empleo inclusivo, igualitario, estable y arraigado" y que las cooperativas tienen un "indudable potencial para construir un futuro rural mejor para Castilla y León".

"Las cooperativas es una de las medidas para fomentar entre los emprendedores potenciales las fórmulas de emprendimiento colectivo de empresas de participación de la economía social", ha señalado.

"Para Castilla y León tiene ventajas que permiten optimizar las potencialidades de la economía local porque aprovechan el producto endógeno y no se deslocalizan y amplían la oferta privada de servicios sociales y educativos", ha sentenciado.