Castilla y León parece estar recuperándose de los daños que la borrasca Juan ha causado en varias provincias. Sin embargo, la crecida de los ríos sigue manteniendo en vilo a muchos ciudadanos de la Comunidad. El temporal de frío, lluvia y nieve ha provocado el desbordamiento en muchas zonas y ha llegado, incluso, a inundar algunas viviendas en la provincia de Valladolid.

Pese a ello, en este martes 23 de enero parece que la situación se encuentra un poco más en calma y tan solo hay dos ríos que permanecen en alerta; en este caso, amarilla. Según ha informado la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) en su Parte Oficial de Avenidas de las 09.15 horas, se trata del Adaja, en Valladolid, a la altura de la localidad de Valdestillas; así como el Zapardiel, también en la provincia vallisoletana, a su paso por Medina del Campo.

Por ello, piden "precaución" en ambas zonas y recuerdan que cuando una estación entra en alerta o alarma la vigilancia "debe extenderse a todo el cauce". Además, también informan de que cuando hay previsión de precipitaciones, los caudales de los cauces "se mantendrán o aumentarán" y, por tanto, se debe "mantener la vigilancia".

En este sentido, cabe recordar que la situación ha mejorado en relación a los días anteriores. De hecho, este lunes 22 de enero había varios ríos en alerta amarilla como el río Cega a su paso por Megeces o el Duero en Quintanilla de Onésimo, Herrera de Duero y Toro. Estos ya han finalizado la situación de alerta por desbordamiento.