Inauguración de la exposición 'Rolando 2:15-2:45. 50 años de la primera masacre de ETA'. En al acto han participado el decano de la Facultad de Filosofía y Letras, Javier Rodríguez; el director del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez; el presidente de la Asociación de Víctimas de Terrorismo de Castilla y León, Sebastián Nogales, y el decano del Colegio Profesional de Periodistas de Castilla y León, Pedro Lechuga

Inauguración de la exposición 'Rolando 2:15-2:45. 50 años de la primera masacre de ETA'. En al acto han participado el decano de la Facultad de Filosofía y Letras, Javier Rodríguez; el director del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez; el presidente de la Asociación de Víctimas de Terrorismo de Castilla y León, Sebastián Nogales, y el decano del Colegio Profesional de Periodistas de Castilla y León, Pedro Lechuga Miriam Chacón ICAL

Valladolid

Llega a Valladolid una histórica exposición para recordar la primera matanza de ETA: "Fue una masacre indiscriminada"

La muestra, que se podrá visitar en la Facultad de Filosofía y Letras hasta el 28 de febrero, presenta una reconstrucción minuciosa de cómo se preparó el atentado.

Más información: La sangrienta huella de ETA en Castilla y León

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El Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, la Asociación de Víctimas y el Colegio de Periodistas de Castilla y León han presentado este martes en Valladolid una exposición conmemorativa del 50 aniversario de la primera masacre de la banda terrorista Euskadi ta Askatasuna (ETA), que dejó 13 asesinados y más de 70 heridos.

Una impresionante muestra con el nombre 'Rolando 2:15-2:45: 50 años de la primera masacre de ETA' que se podrá visitar hasta el próximo 28 de febrero en la primera planta de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Valladolid, que ha colaborado también con la exposición.

Madrid fue la ciudad en la que más víctimas mortales registró la organización terrorista en su historia, y el atentado de la cafetería Rolando, en la calle de Correos, que tuvo lugar el viernes 13 de septiembre de 1974, a las 14:30 horas, fue el acto terrorista en la ciudad en el que más personas fueron asesinadas.

Dos personas visitando la exposición, este martes

Dos personas visitando la exposición, este martes Miriam Chacón ICAL

Aquel día, una potente bomba reforzada con metralla explotó en el comedor de la cafetería Rolando, en la calle del Correo, junto a la madrileña Puerta del Sol. Tras el atentado, murieron 11 personas y más de 70 resultaron heridas, pero el número de víctimas se incrementaría durante las semanas siguientes.

Debido a las secuelas físicas, Gerardo García Pérez falleció el 29 de septiembre de 1974 y el inspector de Policía Félix Ayuso Pinel, el único policía de la lista de víctimas murió el 11 de enero de 1977. De ese modo, el balance final de la matanza de Rolando ascendió a 13 víctimas mortales.

La primera masacre de ETA

El director del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez, ha recordado, durante la presentación de la exposición, que el atentado de la cafetería Rolando de Madrid fue "la primera masacre de ETA y la segunda por número de víctimas de la banda terrorista hasta el atentado de Hipercor en Barcelona en 1987".

La muestra en la Facultad de Filosofía y Letras de Valladolid

La muestra en la Facultad de Filosofía y Letras de Valladolid Miriam Chacón ICAL

"ETA puso una bomba en un restaurante que está al lado de la Puerta del Sol con la excusa de que era frecuentado por policías de la Dirección General de Seguridad que estaba al otro lado de la calle. Pensaban causar una masacre de policías pero causaron una masacre de civiles porque todas las víctimas salvo una eran civiles", ha señalado.

Además, ha recordado que esta acción armada se encontraba vinculada a la trama de apoyo de la organización en Madrid, cuando no se había cumplido ni un año del asesinato del entonces presidente del Gobierno, Luis Carrero Blanco, el 20 de diciembre de 1973 también en la capital de España.

"ETA consiguió un núcleo de apoyo en Madrid y con el respaldo e información de ese grupo, encabezado por Eva Forest, cometió los dos atentados", ha añadido.

Un hombre visitando la exposición, este martes

Un hombre visitando la exposición, este martes Miriam Chacón ICAL

Nunca existió una "ETA buena"

A juicio de Domínguez, el atentado de Rolando debería haber servido "para que no se consolidara la idea de la existencia de una ETA buena, que hacía atentados en el franquismo, porque fue una masacre indiscriminada". "Solo con ese atentado igualó el número de víctimas que había provocado entre 1968 y 1973", ha insistido.

Además, ha recordado que la banda terrorista "no se atrevió a asumir la autoría del atentado cuando se dio cuenta de la barbaridad que había cometido". "Negó su implicación y acusó a la extrema derecha y lamentablemente hubo algunos sectores en el ámbito nacional y muchos en el internacional que le creyeron", ha apuntado.

El director del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo ha señalado que eso contribuyó a la idea de "que hubo una ETA buena, que atentaba durante el franquismo, y una mala". "Nunca hubo una ETA buena y el 95% de los crímenes de ETA se cometieron después de la muerte de Franco", ha insistido.

La exposición

Domínguez ha querido resaltar que en la exposición "hay una contextualización internacional porque el atentado coincide con otros que se están produciendo en otros países de otros grupos terroristas" como el Ejército Republicano Irlandés (IRA), las Brigadas Rojas italianas o la Facción del Ejército Rojo (RAF) alemana.

"ETA no es un fenómeno aislado y exclusivamente nacional, su aparición coincide con la tercera oleada del terrorismo internacional a partir de finales de los años 60", ha apuntado.

El director ha señalado también que en la muestra hay "una reconstrucción minuciosa con documentación de cómo se preparó el atentado". "Cómo fueron a comprar tuercas para meterlas en la bomba para que causaran más daño y está la reproducción de la factura de la tienda de Bayona en la que compraron las tuercas", ha añadido.

El objetivo de la exposición, según ha señalado Domínguez, es recordar "a todas y cada una de las víctimas de ese atentado que habían estado olvidadas". "Algunas nos han dicho que jamás en 50 años habían hablado de ello", ha zanjado.

Unidad por las víctimas

Este lunes, todos los grupos de las Cortes apoyaron una iniciativa del PP en la Comisión de la Presidencia en la que se instaba a la Junta a fomentar el movimiento asociativo y fundacional en defensa de todas las víctimas del terrorismo, apoyando su funcionamiento, el mantenimiento de sus actividades y el desarrollo de sus proyectos.

También se apostaba en la misma por fomentar "el desarrollo y ejecución de los programas que se realicen".

El presidente de la Asociación de Víctimas de Terrorismo de Castilla y León, Sebastián Nogales, presente en la inauguración de la exposición, ha celebrado esa unidad de los grupos políticos por las víctimas.

"Es lo que demandamos de forma continuada las víctimas, que se pongan de acuerdo para reforzar todas las medidas. En 2017 la Junta realizó una ley de apoyo a las víctimas y somos reivindicativos para que esa ley tenga un desarrollo, que es lo que nos falta", ha señalado.

Nogales ha considerado que es importante "que se pongan de acuerdo y que todos nos apoyen, es muy importante para las víctimas y para nuestro relato".

Domínguez, por su parte, ha asegurado que las discrepancias en la política entre los partidos "son legítimas" pero que hay algunos campos "en los que es conveniente que haya consenso".

"Hay temas de Estado y estratégicos, y uno de esos ámbitos es todo aquel que tiene que ver con el apoyo a las víctimas y su memoria. Que se haya conseguido un acuerdo en las Cortes es un dato positivo", ha afirmado.

'La Infiltrada' y los periodistas

Nogales ha celebrado también acerca del éxito de la película 'La Infiltrada', sobre una agente que se infiltró en ETA en los años 90, que se llevó el Goya a la mejor película en la edición de este año,

"Todo lo que sea darnos visibilidad es importante, que realicen documentales, películas y que se sepa la realidad de lo que ha sido el terrorismo", ha afirmado.

El presidente del Colegio Profesional de Periodistas de Castilla y León, Pedro Lechuga, ha hecho hincapié en que los periodistas son "una parte clave e importante para recordar a las víctimas".

"La mayoría de las nuevas generaciones no conoce lo que es ETA y con películas como La Infiltrada se han adentrado en ello. Este tipo de exposiciones es lo que tenemos que seguir haciendo para visibilizar las demandas que tienen aún las víctimas y para que no se olvide lo que ocurrió. No hay que olvidar lo que pasó", ha zanjado.