Rafa Nadal levantó los brazos, miró a la grada, dio las gracias y agarró la Copa de los Mosqueteros entre lágrimas. Ganó su undécimo Roland Garros, se convirtió en leyenda. Ha conseguido, una vez más, alzarse como el mejor tenista de la historia en tierra batida. Y, claro, en las redes sociales, como es habitual, han bromeado sobre la perpetuidad de sus éxitos. Las cuentas We Sport FR y Tennis Legend han hecho un montaje en el que aparece el español con más arrugas, llorando y con un mensaje: gana su 40º Roland Garros y se casa con María Francisca Perelló, Xisca, su pareja.



El tenista español ganó su undécimo Roland Garros después de barrer a Thiem sobre el suelo de la Philippe Chatrier de París (6-4, 6-3 y 6-2) y levantando su 17º Grand Slam. “Cuando tenía siete años, Rafa ganó su primera Copa de los Mosqueteros. No podía imaginar que fuera a jugar contra él. Hoy hemos estado aquí disputando la final. Espero verlo pronto y poder jugar de nuevo con él”, reconoció el austriaco tras caer en París. Y el español no quiso ser menos: “Ha sido un honor jugar contra Domic. Estoy seguro de que más pronto que tarde será él quien levante esta copa”.



La leyenda de Rafa Nadal continúa invariablemente según pasan los años. Incluso, superando las dificultades: ganó con el dedo acalambrado y después de empezar la temporada lesionado y pasar tres meses en el dique seco. Además, conquistó su undécimo Roland Garros frente a Thiem, su verdugo en el Roma hace poco menos de un mes. Por todo eso, han llegado las bromas sobre su receta para ser inmortal. A buen seguro que sólo existe una: trabajar.

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