Y Picasso volvió a ser el rey
El malagueño vuelve a liderar el ranking de obras más caras vendidas en una subasta al alcanzar su lienzo Desnudo, hojas verdes y busto (1932) los 81,9 millones de euros
5 mayo, 2010 02:00Desnudo, hojas verdes y busto
Carlos García-Osuna Durante los años ochenta, cuando el mercado -y los coleccionistas japoneses- entronizó a Van Gogh como el soberano de las cotizaciones (su Retrato del Doctor Gachet se adjudicó por 82,5 millones de dólares), Picasso era el virrey. Pero el genio malagueño se coronó en 2004 en Sotheby's con Muchacho con pipa, la primera pintura que superaba los 100 millones de dólares -se adjudicó por 104,1 millones- y cuyo reinado se ha mantenido hasta febrero de este año en que una escultura de Alberto Giacometti, El hombre que camina , un ejemplar de bronce de los seis que existen en diferentes colecciones privadas y museos, le desbancaba al venderse por 104,3 millones de dólares, pero apenas 100 días ha permanecido la pieza del artista suizo a la cabeza de las obras vendidas en subastas, sustituida por Desnudo, hojas verdes y busto, una tela picasiana de 1932 de significativas dimensiones (162 x 130 cm), adjudicada en Christie´s de Nueva York, en la que retrata a su amante, Marie-Therese Walter, con la que compartió el afectos en su madurez. Es muy probable, sin embargo, que el reinado de esta emblemática obra de Picasso permanezca poco más de treinta días en el sitial de honor conquistado ayer porque en junio espera el Retrato de Ángel Fernández de Soto, un Picasso de la "época azul" cuyas expectativas económicas se sitúan por los aledaños del centenar de millones de dólares. Desnudo, hojas verdes y busto lo pintó Picasso frisando los 50 años estando casado con la bailarina rusa Olga Koklova y tras un lustro de amante de la joven Marie-Therese Walter. Las estimaciones de los subastadores calculaban que podría venderse entre 70 y 90 millones de dólares, aunque otros expertos del mercado estimaban que podría aproximarse a los 150 millones de dólares lo que le colocaría encabezando el ranking de las cotizaciones incluyendo subastas y ventas privadas. Desnudo, hojas verdes y busto fue adquirido por un constructor norteamericano en 1951, Sydney Brody, y ayer lo puso en el mercado su viuda, que no esperaba conseguir la fortuna que pagó un coleccionista anónimo por teléfono, en una puja en la que participaron otros ocho pujadores. Con esta venta vuelve a ponerse de manifiesto que el arte del siglo XX tiene en Picasso a su monarca indiscutido y que las obras sobresalientes como la que ayer se subastaba, incluso en periodo de crisis económica mundial profunda, siempre encuentran quien las quiera.