Magdalena Kožená. Foto: Mathias Bothor.
La checa Magdalena Kozena es una de las más sobresalientes representantes de la joven y esplendorosa generación de nuevas mezzosopranos, a la que también pertenecen Elina Garança, Joyce DiDonato o Angelika Kirchschlager. Todavía en la treintena,
la actual señora de Simon Rattle ha alcanzado ya una extraordinaria madurez interpretativa, que le ha permitido destacar tanto en el campo de la ópera como en el exigente mundo del lied. No parece, sin embargo, haber prodigado en exceso sus actuaciones en nuestro país, por lo que hay que saludar con especial alegría su presencia, el próximo miércoles, en el Claustro de San Francisco de Santiago de Compostela, como brillante clausura del V Festival Via Stellae, en la que constituirá, además, su presentación en tierras gallegas. De la mano de la Orquesta Barroca de Venecia y su titular, Andrea Marcon, ofrecerá una de sus especia- lidades: una selección arias de ópera de Vivaldi, que ya ha llevado al disco con excelentes resultados, combinando la destreza técnica con una mórbida calidez. La entrada es gratuita.