Image: Brahms

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Discos

Brahms

Cuartetos de cuerda

4 septiembre, 2008 02:00

Cuarteto Casals. Claudio Martínez Mehner. Harmonia Mundi HMI 987074.75

Antes de dar a luz los dos cuartetos que constituyen la op. 51 de 1873, Brahms había destruido ya al menos veinte obras de este tipo. La sombra de Beethoven se cernía sobre él; lo que aún era más perceptible en el apartado orquestal. La Primera Sinfonía no apareció hasta cuatro años más tarde. Enfrentarse a las partituras camerísticas citadas y a su compañera de la op. 67 no es nada fácil pues hay que conjugar un férreo dominio de la forma, de la estructura en el fondo clásica, con un control de la variación rítmica y de la progresión temática; y, por supuesto, con una cierta fantasía fraseológica y un especial vuelo para la combinación de las voces intermedias. Los jóvenes del Cuarteto Casals aciertan a marcar tanto el clima como el colorido de la serie nada más empezar el tembloroso aleteo que introduce el primer tema del Allegro inicial de la op. 51/1. Se ensimisman como lo haría una formación veterana, curtida en mil batallas, como el inalcanzable y ejemplar Cuarteto Alban Berg.

Estos instrumentistas, salidos de las aulas de la Escuela Superior de Música Reina Sofía, saben también cantar y buscar la emoción en busca de una expresión que nos trae un Brahms lleno de los precisos claroscuros y, curiosamente, menos apasionado de lo que cabría esperar. La delineación de la Romanza del nº 1 o el discreto aire danzable del subsiguiente Scherzo -al que le faltan quizás algunas gotas de rusticidad-; la clarificación polifónica del complejo Allegro non troppo y la energía y viveza del Finale del nº 2; o la claridad clásica, tan haydniana, de todo el nº 3 son virtudes que enaltecen esta interpretación, que revela el rigor estilístico que opera en las cuerdas de estos instrumentistas. Y que aparece asimismo depositado en el piano de Claudio Martínez Mehner (hermano de Vera, primer violín), que colabora con el cuarteto en una potente y turbulenta, pero bien dosificada de efectos, interpretación del Quinteto op. 34.