Teatro

La mirada reveladora

Danat Dansa homenajea a Buñuel

30 mayo, 1999 02:00

La compañía Danat Dansa presenta del 3 al 13 de junio, en el Teatro Nacional de Cataluña (TNC), "El ojo asombrado" ("L’ull esbalaït"), una coreografía inspirada en la vida y la obra de Buñuel, a partir de los 22 poemas de "Un perro andaluz" que el cineasta escribió antes de filmar la película. Dirigido por Sabine Dahrendorf y Alfonso Ordóñez y con música original de Josep Sanou, el montaje pretende ser una relectura de la obra y de la vida del cineasta aragonés. Para ello han contado con la colaboración de David Trueba y del actor Joan Dalmau, que vuelve a los escenarios, a sus 72 años, para interpretar al "alter ego" de Buñuel.

Anticipándose al centenario del nacimiento de Luis Buñuel, que se celebrará el próximo año, la compañía Danat Dansa ha ideado un espectáculo sirviéndose de 22 poemas admirables que el cineasta reunió con el título "Un perro andaluz" y que escribió antes de que realizara su famosa cinta surrealista.
La compañía huye de calificar su espectáculo como un "Homenaje a Buñuel", aunque por razones comerciales así hayan decidido subtitularlo: "A nosotros nos da cierto respeto la palabra homenaje, es grandilocuente. Simplemente nos hemos inspirado en su trabajo, hemos revisado qué cosas nos conmovían más de su obra para luego trasladarlo a nuestro lenguaje", explica Alfonso Ordóñez, autor de la dirección artística y la coreografía junto con Sabine Dahrendorf.
Subraya Ordóñez que la fascinación que ejerce el cineasta entre los miembros de la compañía viene de antaño: "Hemos realizado espectáculos inspirados en tradiciones ancestrales o en los grabados de Goya de la serie ‘Los caprichos’, temas que también interesaron al cineasta. Siempre hemos tenido afinidad con él, nos ha interesado su manera de relacionar el arte con la vida, su planteamiento estético".

Múltiples asociaciones
En "El ojo asombrado" se perciben múltiples asociaciones con el mundo imaginario de las películas de Buñuel, aunque sus creadores han descartado reflejar planos o secuencias de estas que pudieran ser fácilmente identificables para el público: "No hemos pretendido analizar su cine, sino que hemos preferido hacer una relectura de su obra y de su vida, rescatando por ejemplo, capítulos como la relación tan especial que establecía con las mujeres, o su fascinación-pavor por los insectos, o rescatando el bestiario, los animales recurrentes de sus películas".
Huyendo también de un lenguaje narrativo, el espectáculo se articula en torno a los poemas de Buñuel, que tienen la gran virtud de sugerir imágenes de gran fuerza dramática: "Yo creo que he de morir/ con las manos hundidas en el lodo de los caminos./ Yo creo que si me naciese un hijo/ se quedaría mirando eternamente/ a las bestias que copulan en los atardeceres".
El hilo conductor del espectáculo, en el que actúan ocho bailarines, es un personaje, especie de "alter ego" del cineasta. Un papel que convenció al actor Joan Dalmau, de 72 años, para volver a la escena. Y elementos esenciales del montaje es la música, original de Josep Sanou, un estrecho colaborador de Danat Dansa desde hace cinco años, y la escenografía de Mario Herrero y Josep Cruelles. El equipo ha contado también con la colaboración de David Trueba.
"El ojo asombrado", que se exhibirá en también en Bruselas del 24 de junio al 2 de julio, es uno de los tres proyectos en los que trabaja la compañía en la actualidad. Además, siguen representando "Der Dämon", basado en la partitura de Hindemith que interpreta el grupo instrumental Barcelona 216; y "Ottepel", coreografía que estrenaron en 1994 y que ahora han presentado en Copenhage pero bailada por la compañía Dansk Danseateater de Dinamarca.
La trayectoria de Danat Dansa se ha caracterizado por desarrollar un lenguaje dancístico muy próximo al teatro. Sus fundadores, Sabine Dahrendorf y Alfonso Ordóñez, se conocieron a principios de los ochenta y realizaron su primer espectáculo -"El futuro ya no es lo que era"- en 1984, aunque no es hasta dos años después cuando se constituyen en compañía profesional.

Su espectáculo emblema
"Bajo cantos rodados hay una salamandra", estrenada en 1989, define el estilo de la compañía y les proyecta internacionalmente a partir de la invitación que les hace el Théâtre de la Ville de París. En 1990 estrenan su espectáculo más emblemático, "El cielo está enladrillado", inspirado en "Los caprichos" de Goya y que exhibieron en numerosos países. A partir de entonces, el grupo se consolida y recibe el encargo del Ministerio de Cultura de "Una cierta mirada", pieza breve para tres bailarines que sirve de preludio a su espectáculo dedicado a Kaspar Hauser: "Y quedaré delante de los muros inmensos", estrenada para la Expo de Sevilla. Por otro lado, los miembros de la compañía han colaborado con otros grupos. Así, en 1996, Sabine Dahrendorf participa como coreógrafa en "L’Atlèntida", de la Fura del Baus, y que fue estrenada en Granada.
Hoy es una compañía estable, afincada en Barcelona e integrada por ocho bailarines. Está concertada con el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música y asociada con el Centro de Cultura Contempóranea de Barcelona.

L. P.