Teatro

Vanidades catódicas

"Share 38", de Roberto Santiago

27 febrero, 2000 01:00

Cómica, ácida, crítica, Share 38 devuelve a los escenarios a Santiago Ramos y Pepón Nieto en una historia ambientada en el mundo de la televisión. Escrita y dirigida por el novel Roberto Santiago, la obra es una visión joven sobre la amistad y el poder, en un mundo marcado por el ranking de audiencia y el éxito. Se estrena el 2 de marzo, en el nuevo Centro Cultural de la Diputación de Málaga.

Entre las blancas paredes de los servicios de caballeros de una cadena de televisión transcurre esta obra, un "proyecto arriesgado", según explica Roberto Santiago, autor y director. Un ejemplo de teatro desnudo, de pequeño formato, con dos actores, un único decorado y un texto dramático donde se intenta demostrar lo difícil que es mantener el éxito cuando éste llega de forma repentina. Algo que sucede con frecuencia en televisión, dice Santiago: "La obra no es una crítica a este medio, sino que aprovecho la televisión para contar una historia humana, de dos personas a las que les pasan cosas, que tienen sus miedos y sufren traiciones. Demuestro lo difícil que es compaginar éxito y amistad".

A Santiago se le ocurrió el texto -el primero que escribe y dirige para teatro- a partir de las experiencias que había tenido como guionista en televisión durante cinco años. La obra, además de conseguir el año pasado el Premio Enrique Llovet, llamó la atención de la actriz Blanca Portillo, que decidió producirla: "Me gusta cómo está escrita. Es muy moderna y cinematográfica en los diálogos, tiene un tema atractivo pero está realizada sin ser pretenciosa. Es lo que busco al producir, hacer realidad los proyectos con los que a mí me hubiera gustado encontrarme como actriz. Buscar a nuevos creadores que tengan cosas nuevas que decir, que den una imagen más fresca y viva del teatro".

Arropado por el talento de Portillo, Pepón Nieto y Santiago Ramos , el director levanta el telón para convertir el lavabo de caballeros -"porque se dice que en los cuartos de baño se firman más contratos que en los despachos"- en escenario simbólico y cómico de un conflicto al que se ven arrojados su protagonistas: un maduro director de series y un joven guionista a los que el éxito de su teleserie les coge por sorpresa. Situaciones cómicas que los personajes viven como dramas.

Para dar vida a estos personajes, director y productora acudieron a Santiago Ramos -su personaje fue escrito para él- y al joven Pepón Nieto. "Dirigir teatro es complicado y más cuando te rodeas de grandes actores, como lo son ellos. Pero el hecho de que tengan más experiencia ha sido algo muy aleccionador para mí", confiesa Santiago.

La rapidez cinematográfica, los juegos de palabras y una trama llena de sorpresas recuerdan párrafos magistrales de David Mamet, a quien Santiago tiene muy presente. Aunque sea primerizo en cuestiones dramatúrgicas, este director y autor de 30 años ya rodó un corto que concursó en el pasado Festival de Cannes, Ruleta, y se prepara para dirigir su primer largometraje dentro de varios meses. "El cine y la televisión no tienen nada que ver con el teatro. En televisión todo ha de ser rápido y eficaz, pero en teatro te tomas tu tiempo, porque lo importante es contar algo emocionante y contarlo de verdad. El cine tiene sus trucos para ocultar defectos, en el teatro es donde verdaderamente te la juegas".

El anonimato de un director novel es un riesgo al que todos han estado expuestos. Pero Blanca Portillo ha preferido convertir el riesgo en aventura, segura de su equipo y de la historia que tiene entre manos: "Montar teatro es caro y difícil, y estrenar en Madrid lo es aún más, porque hay muy pocas salas que te quieran programar. ése es uno de los problemas del teatro de ahora".

Obras como ésta son un reflejo de la nueva dramaturgia que llega. "Hay un movimiento teatral joven que se está moviendo a todos los niveles. Hay una necesidad de relevo, tenemos un pulso distinto y queremos hablar de lo que nos importa, de lo que ocurre hoy por hoy, sin que eso signifique renunciar a hablar de lo eterno", explica Portillo.