La Marató de l´Espectacle reúne a 175 compañías
Zapping escénico
13 junio, 2001 02:00El Mercat de les Flors da el pistoletazo de salida a la decimoctava edición de la ya tradicional Marató de l´Espectacle. Una carrera contra el tiempo que durante los días 15 y 16 de junio reunirá teatro, danza, circo, performances, cuentacuentos y hasta disc-jockeys para ofrecer al espectador una dinámica visión de las últimas tendencias escéncias.
Y es que la Marató tiene dos direcciones muy claras: una, hacia fuera, de los artistas hacia el público. No en vano se prevé la asistencia de cerca de 2.500 personas. La segunda, de puertas adentro, mira hacia la endogamia del mundo del espectáculo, ya que cada vez son más los programadores que hacen de ésta una cita obligada. Unos 150, según la organización, acudirán este año, "una cifra que esperamos que aumente", dice López.
¿Se trata, pues, de reivindicar la cultura del zapping, de la abundancia? "Algo así", afirma el director. "Está claro que nosotros estamos ofreciendo algo muy dinámico para gente muy activa".
La compañía
Luciérnaga teatro
Dirección: I. Calvache y ó. G. Villegas.
Intérpretes: A. Pelayo, M. Antón, M. Martín, G. Martín, C. Mayoral, S. Rodríguez, á. Cabanes, S. Marchamalo, M. Serrano, J.L. Agudo, J. Rondán, M. Ramos, P. Romero, E. Rivera.
Madrid. 1989
La compañía que dirige Ignacio Calvache desde hace siete años es un ejemplo de integración y retos superados. La Luciérnaga representa desde hoy en la sala Ensayo 100, su último trabajo, No estoy peor, una obra de texto propio, pero con claras resonancias e inspiración beckettiana. Siete parejas sobre el escenario dan vida a distintas historias, todas con un mundo asfixiante como nota común. La esperanza, una esperanza que para Calvache "salta a impulsos" es el eje que articula la trama. La música, del co-director óscar Villegas, compuesta desde y para el proyecto, equilibra y da unidad a los ambientes.
La ONCE financia este grupo donde doce de los catorce actores son ciegos y del que su director opina "es como una compañía más, simplemente tenemos que trabajar más la movilidad, el espacio escénico,o la expresión facial, pero el trabajo final es arte, todos los actores son muy perfeccionistas y se esfuerzan por que el resultado sea de calidad".