Image: Para volverse loco...

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Teatro

Para volverse loco...

Se estrena en España "Alguien voló sobre el nido del cuco"

26 febrero, 2004 01:00

Los "locos" del psiquiátrico: Alejandra Caparrós y Pablo Chiapella

Escrita por Ken Kesey mientras participaba en un programa de experimentación con alucinógenos, Alguien voló sobre el nido del cuco pasó de novela de culto a película oscarizada. Ahora el director Jaroslaw Bielski estrena por primera vez en España su versión dramática a partir del 28 de febrero en la Sala Réplika de Madrid (Justo Dorado, nº8).

Artaud decía que "los locos son, por excelencia, víctimas de la dictadura social". Casi 25 años después de su muerte, e inspirado por los efectos de pastillas alucinógenas y las imágenes vistas en el psiquiátrico en el que trabajaba, Ken Kesey escribió Alguien voló sobre el nido del cuco. Fue su primera novela y también la de mayor éxito. Pero el que fuera representante de la contracultura de los años 70 debe mucho de su éxito al actor Kirk Douglas, que se fijó en la novela nada más publicarse en el año 1962.

Esquizofrenia literaria
Inmediatamente le encargó su versión teatral al guionista de Los vikingos, Dale Wasserman, quien perfiló una adaptación en la que también participó el propio Kesey. Douglas llevó a escena la obra con escaso éxito, pero eso no impidió que su hijo Michael Douglas comprara los derechos para el cine y le encargara su dirección a Milos Forman en 1975. El resto ya pertenece a la historia del cine. Convertido en un best-seller tras el éxito de la película, Alguien voló sobre el nido del cuco no se había representado jamás en teatro en España, exceptuando un montaje realizado hace años por una compañía amateur universitaria. El director de origen polaco Jaroslaw Bielski se atreve con esta obra -"yo mismo he hecho la traducción al castellano porque no existía una versión en español"- con la que quiere crear un repertorio "diferente" para su sala Réplika, recientemente inaugurada. "Se trata de una obra complicada de representar por la cantidad de actores que precisa", asegura el director, que ha contado con 16 intérpretes de la compañía Réplika, encabezados por Pablo Chiapella y Rodrigo Poisón.

Alguien voló sobre el nido del cuco es un estremecedor alegado sobre "la libertad y el abuso de poder ejercido sobre aquellos que son diferentes". La pieza teatral, al igual que la novela, transcurre en un psiquiátrico, donde es destinado uno de sus protagonistas, que se hace pasar por loco para evitar los trabajos forzosos de la cárcel.

A su llegada se encontrará con un ambiente de represión y miedo, instaurado por la despiadada enfermera Ratched, al que se oponen la solidaridad y fraternidad que humaniza las relaciones entre los enfermos. Sin embargo, existen algunas diferencias entre la versión cinematográfica y la obra de teatro. La más importante afecta a la voz narrativa, ya que en la versión cinematográfica el protagonista es el del personaje que interpreta Jack Nicholson, mientras que en la novela y en la obra teatral la historia transcurre bajo la mirada silenciosa de uno de los enfermos internados, un jefe indio mudo, figura que Kesey veía constantemente a consecuencia de los alucinógenos. La versión teatral elude ciertas referencias a la situación social de los años 70 vivida en Estados Unidos, al igual que algunas escenas de terapias que no aparecen en escena.

Pensamiento cautivo
Bielski ha trabajado con psiquiatras y psicólogos antes de abordar una obra que se adentra en los complejos procesos de la neurosis y en el oscuro mundo de las instituciones psiquiátricas. "ésta no es una historia de locos sino del poder que ejercen ciertas instituciones sobre aquéllos que son distintos y que están indefensos. También es la historia de alguien que se rebela contra la norma y al que le tildan, por ello, de loco. Es una parábola sobre el pensamiento cautivo", dice el director.
Una puesta en escena realista no exenta de poesía y elementos simbólicos y una disposición de las gradas en torno al escenario son las apuestas de Bielski, quien afronta la difícil tarea de dirigir en escena a 16 actores. Para el director, esta obra es coherente con la línea de programación de Réplika "en la que pensamos en el espectador , le implicamos, para que sienta el teatro como una experiencia distinta al cine y la televisión". Anteriormente la sala había programado Nuestra cocina, del dramaturgo José Luis Alonso de Santos.

El norteamericano Ken Kesey (1946-2001) se ganó en vida el apodo de "profeta psicodélico", ya que las drogas determinaron su vida y su obra. A finales de los 50 se sometió a un experimento con alucinógenos en el mismo centro psiquiátrico donde trabajaba, lo que influyó en Alguien voló sobre el nido del cuco. En los 60 recorrió EE.UU en un autobús cargado de drogas alucinógenas junto a unos amigos, por lo que fueron conocidos como los "Alegres bromistas". Su segunda novela lleva por título A veces, una gran ocurrencia.